En la Secretaría de Hacienda señalan que la economía electoral está blindada y que los flujos de capitales no representan riesgos para el tipo de cambio. Es un dato político porque algunos economistas cercanos a Xóchitl Gálvez todavía deslizan la posibilidad de alguna sorpresa de mercado que complique al oficialismo.

La entrada y salida de flujos de capitales solía ser un tema central durante el proceso electoral, pero en el último sexenio hubo un giro en el mercado, como se puede observar en el tipo de cambio, donde el peso resulta muy fortalecido a pesar de la menor tenencia de valores gubernamentales.  De hecho, el la moneda nacional, la más líquida de la región, se sostiene estable a pesar de que el año pasado la balanza de flujo de capitales dio en negativo.

La balanza de pagos no ha logrado recuperarse desde la salida de fondos observada en la pandemia pero este ya no es un factor para la estabilidad del tipo de cambio.

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"El tema sobre el flujo de capitales ya no tiene el mismo impacto que tenía antes en las elecciones, ahora es más importante observar el comportamiento de las remesas, las tasas de interés, el tipo de cambio", explican desde Hacienda.

Durante el 2023, la balanza de pagos del banco central mostró un déficit de 5 mil millones de dólares, aunque fue una reducción desde el déficit del año anterior en 17,667 millones.

Por su parte, la tenencia de valores gubernamentales por residentes en el extranjero se vio afectada principalmente por la pandemia de Covid-19, periodo en que se vio una desinversión a nivel mundial.

 En 2022 se observó en México un mínimo de 1.5 billones en tenencia de valores del tesoro y actualmente se ubica en 1.8 billones, por debajo del nivel de 2.2 billones registrados previos a la pandemia. 

Los datos no deberán generar preocupación, dicen desde la dependencia, desde donde observan que las remesas es el catalizador que ha tomado mayor relevancia. Un indicador que ha desafiado todos los pronósticos desde hace años.

Fue a partir del 2016 que el tmea tomó centralidad en medio de las elecciones de Estados Unidos, cuando el candidato Donald Trump prometía bloquearlas, como estrategia antimigrante. Luego, el periodo de cuarentena y el freno en algunas actividades económicas debido a la pandemia también alentaba especulaciones de que la llegada de estos dólares al país se vería afectado.

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Lejos de eso, la llegada de remesas tuvo incrementos récord. Durante el 2023 el país registró una entrada de 63.3 mil millones de dólares tan solo por concepto de remesas, superando las entradas por IED, que fueron de 36,058 millones de dólares.

Además, la entrada de remesas también ha sido un factor que explica, en cierta medida, la fortaleza del peso, que no sufrió a pesar de los menores flujos de capital.