Luego de que el sindicato del Metro frenó la semana pasada el servicio bajo argumentos que en el GDF consideraron "endebles", el entorno del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, le recalcó a Jorge Gaviño la necesidad de que ponga un limite sólido a las acciones de los trabajadores. 

El paro, que llevaron a cabo 70 operadores de la Linea 7, fue sostenido primero como una respuesta a la falta de pago del sector y luego, como una consecuencia de no haber cubierto el dinero por sus horas extras. 

Desde entonces, le reclaman al funcionario que retome "la manija" de las negociaciones para no quedar sumidos en el caos de que sea el sindicato quien marque los tiempos.

Y es que desde la Ciudad creen que luego de que el candidato perredista Juan Zepeda se pronunció por más líneas de Metro en el Estado de México, y aseguró que operaría como en la Ciudad de México, poniéndolo de ejemplo. 

"No podríamos asegurar que los trabajadores están apoyando a otros partidos, pero sí creemos que hay una tendencia a querer corroer el apoyo que tiene Zepeda en el estado de México y que, como él utilizó al Metro como un eje de campaña, quieren mostrarlo ineficiente", señalaron desde el GDF.

Como dato a recordar, cabe destacar que en abril los trabajadores del Metro manifestaron abiertamente su apoyo a Delfina Gómez, la candidata de Morena para el Estado de México.

Fue cuando el secretario general del gremio, Fernando Espino Arévalo, ofreció respaldo público a la candidata diciendo que "el 50 por ciento de los onductores y trabajadores del Metro son de Estado de México y apoyan su proyecto" 

"Con gusto recibimos a la maestra Delfina Gómez. Más del 50% de los trabajadores del Metro tienen su residencia en el estado vecino que usted aspira a gobernar. Este sindicato siempre abierto a las expresiones políticas y comprometido con las libertades de pensamiento de nuestro gremio sabemos que usted contará con el apoyo de muchos electores de esta gran familia Metro en las elecciones del próximo 4 de junio", había expresado.