El directo de Pemex, José Antonio González Anaya, reconoció que podría haber personal -tanto de confianza como sindicalizado- vinculado al robo de gasolinas, un mercado ilegal que creció en los últimos años. "Es posible que haya personas de Pemex involucradas", aseguró.

González Anaya negó, sin embargo, que se trate de una organización estructurada dentro de la empresa. Dijo que la institución todavía no detectó que ningún grupo específico que esté colaborando desde la empresa ni desde el sindicato.

El funcionario contó además que todas las semanas participa de una reunión con los titulares de Hacienda, Segob, PGR y las fuerzas de seguridad para implementar nuevas medidas contra los huachicoleros. "Ahora estamos intentando también ir contra la demanda del combustible robado", explicó.

Explicó entonces que, hasta el momento, el Gobierno intentaba combatir este problema con "prevención", pero ahora se dieron cuenta que podían ser más efectivos buscando los puntos de venta. "Ese combustible no se vende en las calles masivamente, sino que se hace a través de gasolineras oficiales y también a algunos usuarios industriales".

El robo de combustible fue creciendo en los últimos años. El mercado de las gasolinas en México se calcula en 700,000 mil millones de pesos. Y el mercado negro ya alcanzaría 20,000 millones, es decir casi el 3% ya se lo llevan los huachicoleros.

"Son dos fenómenos distintos. Por un lado están las organizaciones criminales más estructuradas, como vimos en Puebla, por otro lado está el robo de las comunidades que se acercan a las tomas", relató González Anaya en una entrevista con Loret de Mola.

"Los ductos los rompen con un serrucho. No es tan difícil. Pero es un riesgo enorme para las personas, que incluso se bañan en diesel. Si eso se prende sería una tragedia. A veces detectamos una toma y cuando enviamos personal, la comunidad no nos deja pasar", concluyó.