Luego de que vecinos de las delegaciones Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero solicitaron al gobierno de la Ciudad de México realizar "un espacio de discusión y acuerdos" sobre la construcción de la Línea 7 del Metrobús, el creador del programa "Hoy No Circula", Ramón Ojeda Mestre, pidió a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atraer el caso de la Línea 7 del Metrobús, ante la polémica desatada por su construcción.

"En el caso de la Linea 7 del Metrobús, el problema fundamental no es el proyecto, sino que, como en muchos de sus proyectos, el gobierno no informa a los ciudadanos con oportunidad, y no tiene oídos abiertos a sus inquietudes y demandas", expresó Mayela Delgadillo, vecina de la colonia Roma y promotora del diálogo con las autoridades.

En opinión del también ex secretario del Medio Ambiente durante la administración de Manuel Camacho Solís, en caso de que el Máximo Tribunal intervenga se podría agilizar los tiempos, a fin de descargar la presión contra el juez octavo de Distrito en Materia Administrativa, Fernando Silva García, luego de que éste ordenó la suspensión definitiva de la obra. 

Así los señaló el propio Ramón Ojeda en entrevista con Ciro Gómez Leyva, quien acusó al jefe de gobierno capitalino como el responsable de presionar políticamente al juez  Fernando Silva para que eche atrás la orden de suspensión.

"Esto es muy importante porque yo veo que el jefe de la Ciudad de México Miguel Ángel Mancera, está moviéndose extrajudicialmente, fuera de juicio, con una serie de convenios, reuniones, despreciando un poco el canal del juicio de amparo en el que se debería de estar moviendo y eso es muy delicado", reprochó Ramón Ojeda.

Y continuó: "Eso me recuerda mucho a Luis XIV, al Rey Sol, El Estado soy yo, aquí no es de que él mueva o no mueva, aquí va a ser lo que el juez le indique. Que si el proyecto está mal, como lo está; si el proyecto causa grandes daños al ambiente", criticó.

En su calidad de presidente de la Academia Mexicana de Derecho Ambiental, Ojeda Mestre es opositor a la obra y demandante de un juicio de suspensión por lo que el define como "daños y contaminación por la mala planificación de la construcción del Metrobús".

"Escogieron el peor de los combustibles para un autobús de dos pisos a 2,240 metros sobre el nivel del mar, es decir que va a tener más peso sobre el piso, sobre el suelo y aparte como hace mayor esfuerzo el motor, esos motores ingleses que no están fabricados, los de la fábrica Alexander Dennis Limited, no están hechos para trabajar a 2.240 metros sobre el nivel del mar", advirtió Ojeda Mestre.

Por último, el experto en materia ambiental aseguró que esto no es una cuestión de egos, sino de instituciones: "Y no estar siguiendo un procedimiento extrajudicial y reuniéndose con funcionarios del INAH, cuando ya se presentó un documento formal, oficial, diciendo que no estaba en esos términos de autorización y que no puede hacerlo, porque es considerado un monumento histórico, aunque haya tenido muchas alteraciones, en fin, estamos ante un triple problema".