El senador Miguel Barbosa y la bancada de PT-Morena en el Senado realizaron hoy una conferencia de prensa en la que pidieron al Instituto Nacional Electoral que comenzara el proceso para disolver al PRI como partido político. 

Entre sus argumentos, dijeron que "en cualquier país del mundo los delitos que acumula el PRI servirían para poner a un presidente de rodillas", y criticaron la falta de respuestas del tricolor específicamente en el caso de la vigilancia a periodistas revelada por el New York Times.

  "En cualquier país del mundo, en cualquier sistema de partidos de cualquier país del mundo un partido al que se le acreditar esta condición tiene como sanción su disolución", dijo.

Denunciaron, entre otras cuestiones, al exgobernador de Chihuahua, César Duarte por desvío de recursos durante su administración con el fin de financiar al PRI durante seis años. "También hubo serias irregularidades en Veracruz, Quintana Roo y las que se sumen, pues la corrupción está en el ADN del PRI", señaló.

Según Barbosa, en la administración de Duarte Jaquez hubo un desvío de 10 mil millones de pesos del gobierno de Chihuahua al PRI nacional de 2010 a 2016. "Esto se hizo no solamente a través de descuentos a los trabajadores sino a través de entregas materiales de dinero para actividades propias del partido político nacional", dijo.

"Retamos a Enrique Ochoa a que siga hablando de honradez, y que siga hablando en contra de otros partidos políticos. Que salga y de la cara y hable y explique. Y que en todo caso se determine también la responsabilidad de Enrique Ochoa en estos actos por el tiempo que ha sido dirigente nacional", añadió el morenista.

Recalcó que en ningún país del mundo se desvían recursos de los gobiernos estatales sin que ocurra nada y recalcó que todavía falta descubrir cuánto dinero ha sido desviado desde las administraciones en