Adalberto Madero ya está lanzado a su intento por ser alcalde de Monterrey nuevamente. El hecho de que Ricardo Anaya le haya bajado el pulgar semanas atrás o de que Rafael Moreno Valle no le diera el monopolio de su campaña en la entidad norteña no desaniman a Madero que ya anda comentando tener 6 millones de pesos para su campaña. Dice además que basará su discurso en la anticorrupción (aunque él mismo estuvo encarcelado) y que señalará negocios irregulares del actual alcalde Adrián de la Garza.  Lo más difícil parecer lograr la candidatura panista ya que tiene múltiples enemigos en el comité estatal además del hecho de que se trata de una contienda para la cual el Partido ya tiene potenciales anotados como Víctor Pérez, Baltazar Martínez o Iván de la Garza.

Hablando de candidaturas, ya se conoce que el primer abanderado de Morena al Senado será un hombre. Rápidamente se generaron múltiples especulaciones pero en el sector empresarial, ese que AMLO quiere seducir, y así ganó fuerza la posibilidad de Antonio Barceló, CEO del Grupo Galeria y ligado a la familia Garza Sada que capitanea el emporio Alfa. Barceló le ha organizado encuentros a Yeidckol Polevnsky en el Club Harvard y la ha conectado a los grandes capitales regiomontanos.

Siguiendo con el armado morenista. Una conclusión del último viaje de Polevnsky a Monterrey es que ya se habría decidido que el partido juegue en todos los distritos el año que viene en Nuevo León. Atrás quedó la idea de Poncho Romo de solo presentar candidatos en los lugares taquilleros de la zona metropolitana.

Si bien la elección de Coahuila sigue con un final discutido, Fernando Turner ya envió funcionarios a Saltillo a intercambiar con el equipo de Miguel Riquelme para asegurar la continuidad de ciertas acciones conjuntas iniciadas durante el gobierno de Rubén Moreira.

El Bronco no es el único que arrastra conflictos con el Grupo Reforma. Alejandro Junco ya se ha quejado en ámbitos calculados que no le gusta el rol que está tomando el ex gobernador Fernando Canales en el armado de Margarita Zavala. Canales tuvo un duro enfrentamiento con la familia Junco cuando fue gobernador y también amenazaba con demandarlos. A esto se suma, detalle no menor, la buena relación de Ricardo Anaya con ese grupo mediático.