El escándalo por el uso indebido del malware Pegasus no ha dado la nota final. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) exigió hoy a México una investigación independiente sobre los presuntos intentos de espionaje en contra del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) para el caso Ayotzinapa y que permita ubicar a los responsables. 

"Debe haber una investigación con todas las garantías de independencia e imparcialidad, que establezca las responsabilidades tanto materiales como intelectuales de las supuestas acciones de espionaje", pidió el presidente de este órgano de la OEA, el peruano Francisco Eguiguren.

Y añadió: "Las denuncias son extremadamente preocupantes, en particular la información presentada por miembros del GIEI de que también habrían sido espiados", expresó el también ex ministro de Justicia de Perú este lunes al ser cuestionado sobre los presuntos hechos ocurridos en 2016.

Esto último luego de que investigadores del Citizen Lab de la Universidad de Toronto, Canadá, confirmaran que al menos un teléfono de un miembro del GIEI recibió mensajes para intentar una infección electrónica en marzo de 2016.

Por su parte, el coordinador de los diputados del PRD, Francisco Martínez Neri, exhortó a las autoridades federales a esclarecer el presunto de espionaje a los expertos del GIEI durante sus investigaciones sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en Iguala.

"La negativa por parte de estas dependencias a explicar solamente abona a las suspicacias, por lo que vemos indispensable y urgente que se aclare a cabalidad qué está sucediendo", apuntó el perredista, quien remarcó que los principales sospechosos de la presunta intervención de comunicaciones son la PGR, el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y la Secretaría de la Defensa Nacional. Por ello, es necesaria una investigación autónoma del poder.

Además, resaltó que el espionaje a los expertos "abona más a la teoría de que el gobierno federal no quiere que salga a la luz la verdad de lo que ocurrió con los 43 jóvenes estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa; se trata, sin duda, de uno de los capítulos más oscuros en la historia de México y distintivo del actual sexenio".