La petrolera mexicana reaperturó y colocó dos bonos a plazo de 10 y 30 años en el mercado y recompró bonos para estos años.

Encaminada hacia el objetivo de reducir la deuda y mejorar sus operaciones financieras, Pemex salió al mercado internacional para obtener financiamiento y reducir la deuda contemplada para el 2018 y 2019.

Este domingo, la petrolera que dirige José Antonio González Anaya anunció la obtención de financiamiento mediante la la reapertura y colocación de dos bonos vigentes de referencia, a plazos de 10 y 30 años.

También señaló la recompra de bonos con vencimientos en 2018 y 2019, "disminuyendo así el monto de amortizaciones de deuda que Pemex debe realizar en estos años", precisó la empresa mexicana.

Por lo anterior, logró colocar así un monto de 5 mil millones de dólares, habiéndose registrado una demanda cercana a los 15 mil millones de dólares y asegurando una participación princiapalmente de inversionistas de Estados Unidos y Europa.

Con estos recursos, Pemex recompró bonos que tenían vencimiento en los próximos dos años, lo que reduce sus compromisos de pago de deuda en ese periodo. El monto fue por aproximadamente mil 742 millones de dólares.

"De esta manera, la empresa extiende la vida promedio de su portafolio de bonos en dólares en 1.1 años, disminuyendo significativamente sus necesidades de refinanciamiento", señaló la petrolera.

Agregó también que ahora total disponibilidad de sus líneas de liquidez bancarias. El monto agregado de estas líneas equivale a 1.6 veces los vencimientos de deuda en 2018. Como ventaja adicional, la empresa también podría recurrir a los mercados financieros nacionales e internacionales para incrementar su flexibilidad financiera.