El poderoso Congressional Black Caucus, una sub bancada formada por congresistas negros, principalmente del Partido Demócrata, demandó la renuncia del Fiscal General Jeff Sessions por "mentir bajo juramente en más de una ocasión".

"El Fiscal General Sessions no está capacitado para servir como el máximo funcionario de la ley en esta nación y debería renunciar de su posición inmediatamente", acusaron en la bancada negro. 

Sessions ha ocultado en repetidas ocasiones reuniones que sostuvo durante la campaña con personajes cercanos a Vladimir Putin, principalmente con el ex embajador Sergey Kislyak. "Sessions está tratando al Congreso y al pueblo norteamericano como tontos", agregaron.

Apenas el viernes pasado el Washington Post publicó que -de acuerdo con reportes de una agencia de inteligencia- Sessions sí había discutido con Kislyak temas referentes a la campaña presidencial de Trump, a pesar de haber asegurado ante el Comité de Inteligencia del Senado lo contrario.

Trump estaría considerando reemplazar a Sessions con Rudy Giuliani, el ex alcalde de Nueva York que también fue uno de los primeros en apoyar su candidatura

Hoy trascendió que Trump estaba considerando reemplazar a Sessions con Rudy Giuliani, el ex alcalde de Nueva York que también fue uno de los primeros personajes conservadores en apoyar la candidatura del magnate. 

Sessions fue el primer funcionario electo en respaldar a Trump durante la campaña presidencial del año pasado, y estuvo en la comitiva presidencial que visitó Los Pinos junto con el entonces candidato poco antes de la elección del 8 de noviembre.

Trump ha expresado varias veces su enojo con Sessions por haberse recusado de la investigación del caso Rusia. Durante una entrevista con el New York Times la semana pasada, el presidente dijo que de saber que Sessions iba a aislarse de la investigación, jamás le habría ofrecido el puesto de Fiscal General.

Actualmente la investigación de los posibles nexos y posible colusión entre el Gobierno ruso y la campaña de Donald Trump está siendo conducida por Robert Mueller, quien ocupó la dirección del FBI entre el 2001 y el 2013. El equipo del presidente ya está intentando desacreditar a Mueller y la investigación a la que han calificado como "una cacería de brujas".

Por su parte, Giuliani declaró que Sessions hizo bien en recusarse de la investigación para evitar caer en un conflicto de interés como cabeza del Departamento de Justicia.

Como respuesta a las críticas del presidente, Sessions aseguró la semana pasada en conferencia de prensa que no tenía pensado dejar su cargo al frente del Departamento de Justicia. 

En un principio la Casa Blanca, a través de la vocera Sarah Huckabee Sanders, insistió en que Sessions contaba con la confianza del presidente, sin embargo, durante el fin de semana Trump volvió a atacar a su Fiscal General, esta vez desde su cuenta de Twitter, donde cuestionó por qué el "sitiado" Sessions no estaba investigando a Hillary Clinton también.