Mario Delgado confirmó sus intenciones de pelear por la postulación para la Jefatura de Gobierno sobre el filo de los tiempos que había establecido el Consejo Nacional de Morena. Su incursión en generó zozobra en la mesa que ya habían instalado Ricardo Monreal, Claudia Sheinbaum y Martí Batres.

La Política Online pudo saber que el más afectado por esta decisión fue el dirigente de Morena-DF, que interpretó la decisión de Delgado como un mensaje directo de Marcelo Ebrard, quien efectivamente sigue en contacto con el senador.

"Martí piensa que Ebrard empujó a Mario para poder negociar el paquete completo con AMLO", resume un moreno que sigue de cerca las negociaciones de las últimas semanas.

Hay que recordar que el vínculo entre Batres y el ex jefe de Gobierno terminó muy mal, con el pedido de renuncia del entonces Secretario de Desarrollo Social. La pelea fue mediática, imposible de negar.

Como explicó LPO, el tridente había establecido una mesa de trabajo todos los martes y jueves, con la inclusión de Ramón Jimenez como moderador, después que Andy López Beltrán -hijo de AMLO- decidiera ausentarse para no dar señales equívocas de preferencia.

"Ahora Martí no quiere incluir a Mario en la mesa. No acepta que se siente. Cree que esperó hasta último momento para dinamitar los acuerdos que se empezaban a tejer en esa mesa, para que el Consejo Estatal tenga que votar entre cuatro, en lugar de sacar una terna por consenso unánime", resumió la misma fuente.