Ricardo Monreal estuvo en silencio un puñado de días y ahora volvió a dejar un nuevo mensaje en redes sociales. El delegado de la Cuauhtémoc se niega a anunciar su renuncia a Morena. "Sería darle el gusto a la nomenklatura, para que puedan hablar de traición", aseguran en su equipo. La estrategia parece ser otra: convertirse en una piedra en el zapato de AMLO desde adentro, exigiendo una revisión en la famosa encuesta.

"No hemos aceptado ningún ofrecimiento. Que sostengo inalterable mi propuesta y que ratifico que sólo tengo un Plan A. Algunos creyeron que aceptaría cualquier propuesta, puesto o estímulo, y que pronto todo se olvidaría. Pensaron que incluso era un mero gesto de chantaje o un berrinche menor, que sería compensado. No fue así y no será así", dijo Monreal en un video.

En efecto, en Morena se daba por sentado que un puñado de delegaciones y diputaciones federales calmarían los actos de rebeldía. Incluso Andrés Manuel López Obrador le dedicó un mensaje de alto contenido político en su evento del Monumento a la Revolución, pero con el cuidado de no mencionarlo. La idea de un acuerdo con el delgado sigue vigente.

Pero como reveló La Política Online, Monreal sí está conversando con diferentes partidos para tantear un posible lanzamiento por el Frente Amplio. De eso se conversó en su comida del viernes pasado en Gaudi con los máximos caciques del PAN en la Ciudad: Jorge Romero y Christian Von Roehrich.

Lo confirmó el propio delegado: "También informo que como ha sido mi costumbre, en mi libertad y convicción, estamos conversando con diferentes actores políticos y sociales acerca del futuro de la Ciudad. Ese futuro no se puede dar en la inercia ni en la confusión, ni dejarse a la suerte o la improvisación".

Monreal contaría con el aval de dos integrantes del Frente: Dante Delgado -que conduce Movimiento Ciudadano- y el panismo capitalino. Pero deberá sortear un obstáculo difícil: conseguir el apoyo de Miguel Ángel Mancera y del PRD-DF.

Se trata un equilibrio complejo, pues Ricardo Anaya y Miguel Ángel Mancera disputarían la candidatura presidencial. En el PAN creían que garantizando la continuidad del mancerismo en la Ciudad lograrían hacer declinar al Jefe de Gobierno. ¿Aceptaría Mancera entregar su territorio y tener que bajar otra vez a Alejandra Barrales? Parece muy difícil.

En esa ecuación es que ya hay panistas como Roberto Gil Zuarth que piensan que Anaya necesita la Fiscalía General para lograr esos equilibrios: Monreal en la Ciudad, Anaya en la Presidencial y Mancera como fiscal. ¿Realidad o utopía política?