Cuando estalló la mega causa de sobornos de Odebrecht no sólo tuvo sus impactos políticos en Brasil, sino sus ribetes en varios países donde operaba la constructora. México fue uno de ellos, con la revelación de que se había pagado a altos funcionarios de Pemex 10 millones de dólares para obtener obras. Con el correr de los meses la investigación para encontrar a los responsables locales sigue siendo de las más atrasadas en toda la región.

Emilio Lozoya está en blanco de todos los señalamientos, e incluso fue mencionado por varios directivos de Odebrecht como un hombre clave e incluso como el futuro presidente de México. Tres ex ejecutivos inculpados e investigados en Brasil apuntaron también contra el ex funcionario de la administración de Peña Nieto. 

Pero también otras empresas se vieron salpicadas. Una de ellas fue la argentina Techint, que formó parte de las 23 empresas a las que se les prohibió firmar nuevos convenios con la petrolera brasilera -hasta que se aclaren las denuncias en su contra-.

Techint tiene ampliso y variados negocios en México, pero sin dudas uno de sus contratos más resonantes es el de las obras del gasoducto Los Ramones, acaso el proyecto más ambiciosos en materia de gas natural que emprendió el gobierno mexicano.

La iniciativa contará con una inversión total, en todas sus fases, de 2.500 millones de dólares. Y parte de los contratos están en manos en las multinacionales Techint y Odebrecht, ambas implicadas en los escándalos en Brasil. Hay que recordar que Techint fue allanada en San Pablo, puntualmente por "cartelizarse" en las obras de Angra 3.

Quisiéramos ambos, ya como Consorcio, ir a platicar contigo sobre nuestros acuerdos internos así como plantearte ciertas inquietudes

Pero en México, es en la fase II de la obra Los Ramones -que recorrerá 738 kilómetros, hacia los estados de Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí- en donde ingresan Techint y Odebrecht, que ganaron la licitación conformando un consorcio junto a la mexicana Arendal.

En rigor, la segunda fase se dividió en dos partes: "Ramones Norte" y "Ramones Sur". El consorcio OAT (Odebrecht-Arendal-Techint) consiguió en julio de 2014 pasado el segmento más jugoso: Los Ramones Norte, que tendrá una inversión de 1.052 millones de dólares por 441 kilómetros del ducto.

"La compañía tiene total independencia en cada uno de los países. Por lo tanto, lo que suceda en Brasil no tiene nada que ver con los negocios aquí en México", fue la respuesta que recibió LPO en más de una oportunidad desde las oficinas de Odebrecht en Distrito Federal desde que estalló el escándalo.

Ahora se supo que la desginación directa se habría organizado en reuniones privadas con Emilio Lozoya, según explica el periodista Mario Maldonado, en su columna del Universal. Allí se filtraron tres correos electrónicos cruzados entre el ex director de Pemex y directivos de Odebrecht, en donde se revela no sólo la relación amistosa sino también las conversaciones que llevaban en privado para concretar el negocio de Los Ramones.

Flickr

El primer lastimado con esta filtración es el propio Lozoya, pues el 17 de agosto pasado, durante una conferencia de prensa, aseguró desconocer a los funcionarios de Odebrecht y sólo admitió que conoció a Luis Weyll por "motivos de trabajo". También descalificó las "confesiones" de los ex funcionarios de Odebrecht en Brasil. 

"Querido Marcelo. Querido amigo. Desde México te mando mi más sentido pésame por la pérdida de tu querido abuelo Don Norberto Odebrecht. Ejemplo de emprendedor, ciudadano brasileño ejemplar, líder comprometido con sus trabajadores y comunidades donde la empresa trabaja... deja un legado extraordinario y seguirá presente de muchas formas. Recibe un abrazo muy afectuoso y solidario de parte mía y de mi familia. Emilio Lozoya". La relación fraterna, al parecer, sí existía.

Querido Marcelo. Querido amigo. Desde México te mando mi más sentido pésame por la pérdida de tu querido abuelo Don Norberto Odebrecht. Ejemplo de emprendedor, ciudadano brasileño ejemplar

Pero en otros correos también se revelan las reuniones que existían entre los representantes del consorcio OAT y el entonces titular de Pemex para organizar la obra de Los Ramones. Las citas habrían ocurrido en enero de 2014, algunos meses antes de haberse adjudicado la obra.

Adrián García Pons, cofundador de Arendal, le habría escrito a Lozoya: "Emilio. Gusto en saludarte. Espero que todo bien. Te comento que a finales de la semana pasada sostuvimos reuniones entre Odebrecht y nosotros llegando a acuerdos del Consorcio que se formaría. También el miércoles pasado sostuvimos una reunión ya como potencial Consorcio con Gasoductos de Chihuahua (GDC)".

Y le pide: "Quisiéramos ambos, ya como Consorcio, ir a platicar contigo sobre nuestros acuerdos internos así como plantearte ciertas inquietudes después de nuestra reunión con GDC. Luis (Weyll), a quien copio en este correo, sale a Brasil y está de regreso el fin de semana. Tendrás tiempo de recibirnos el lunes 20? Nos adecuamos a tu agenda. Saludos, Adrián".