El comentario circuló en la comida del pasado martes en Los Pinos a la cual asistieron las grandes fortunas del país para ser reconocidos por sus apoyos a la reconstrucción tras los sismos de septiembre. Allí estaba Emilio Azcárraga y también Carlos Slim. Quienes asistieron cuentan que en esta ocasión Slim tenía un asiento de mucho más privilegio que el saliente CEO de Televisa. Detalles que se deben observar porque hace cinco años esa situación hubiera sido a la inversa.

En el transcurso del encuentro, se mencionó entre algunos comensales que Azcárraga estaría apoyando las actividades de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), influyente ONG que dispara casi semanalmente contra el Gobierno de Enrique Peña Nieto. El último estiletazo fueron los Paradise Papers.

MCCI es conducida por Claudio González Guajardo, hijo del magnate Claudio X. Gonzáles que tuvo un duro cruce meses atrás con Peña Nieto en Los Pinos y que luego terminó escalando en las páginas del New York Times. 

El caso es que Azcárraga tiene una excelente relación con  Claudio X que ha sido su consejero en temas sensibles de Televisa. En diferentes círculos se le atribuye al titular de Televisa haber impulsado a González Guajardo como posible candidato del Frente Amplio en una velada con Ricardo Anaya.

En paralelo se argumenta que Azcárraga colabora con MCCI especialmente desde el portal Animal Político, que la televisora ya estaría controlando aunque no ha existido una comunicación oficial como con otros sitios como SDP o Deforma.  Animal Político se ha convertido en un fuerte difusor de las denuncias explosivas de MCCI. El caso más reciente fue la Ferrari de Raúl Cervantes estacionada en Morelos.

Se cree en Los Pinos que ese caso fue la vendetta de Azcárraga luego de que la Corte Suprema tumbara la interconexión cero en favor de Slim. El ex procurador cabildeó demasiado en favor de Telcel.