Los actos y las fotografías amistosas en la Ciudad de México tienen un correlato más incómodo en las entidades. El Frente Ciudadano parece haber logrado una imagen de unidad inquebrantable en el centro del sistema político -pese a los embates que llegan desde Los Pinos-, pero cuando se observa un poco más en la periferia la realidad parece ser bastante diferente.

En muchos territorios, los liderazgos locales -ya sean alcaldes o gobernadores- todavía resisten una imposición desde los Comités Ejecutivos Nacionales o incluso cualquier unión de hecho con el resto de los partidos que integrarían el Frente Cuidadano.

Uno de los casos más emblemáticos es Jalisco. En entrevista exclusiva con La Política Online, Enrique Alfaro fue explícito sobre su postura: quiere apoyar al Frente en lo nacional, pero prefiere ir con Movimiento Ciudadano en soledad para la gubernatura.

"Nosotros estamos listos para competir con éxito solos. Pero hay otro elemento central: el eje de nuestro discurso político ha sido desafiar la lógica de los partidos tradicionales. Así construimos nuestro capital político. Ir en contra de esa premisa podría ser un problema serio", explicó el alcalde de Guadalajara.

No es el único caso. En Guanajuato el PAN resiste compartir sus espacios con el PRD. Algo similar ocurre a nivel local en Querétaro: el gobernador Francisco Domínguez no observa ningún beneficio -salvo potenciar la candidatura presidencial de su adversario local, Ricardo Anaya- en la conformación de un Frente en su entidad.

La lista sigue: la dirigencia local del PRD en Chiapas -afin al gobernador Manuel Velasco- no quiere saber nada con una alianza con el PAN. El Sol Azteca vive el mismo escenario en Yucatán y Oaxaca.

"El problema con estas negociaciones es que nos falta tiempo. Es una tarea muy delicada, y tanto Anaya como Barrales y Delgado se concentraron en los temas nacionales. La fecha límite para inscribir las coaliciones es el 13 de diciembre. ¿Cómo resolver tantos problemas si recién se empezaron a instalar las mesas y ni siquiera hay claridad en la definición presidencial?", se preguntó un militante perredista en diálogo con LPO.

Desde el CEN del PAN no descartan que haya alianzas parciales, según los intereses de cada cacique local. "Puede haber Frente para la presidencial y en las entidades donde haya voluntad. Donde no haya voluntad, cada uno irá por su cuenta", explicaron.