Ayer el senador demócrata Al Franken, una de las principales voces opositoras a la administración de Donald Trump, reconoció los alegatos que hizo la reportera Leeann Tweeden en su contra. Franken pidió una disculpa pública por haber tocado y besado en contra de su voluntad a la reportera hace diez años durante una gira en Irak. Hoy la ex secretaria de Estado y ex candidata presidencial demócrata Hillary Clinton criticó la respuesta que Donald Trump y el candidato a senador Roy Moore han ofrecido a sus propias conductas sexuales.

En entrevista en el programa de radio de Rita Cosby, Clinton dijo que Franken aceptó sus errores y mostró estar dispuesto a enfrentar las consecuencias de sus actos, mientras que Moore y Trump se han negado a reconocer o buscar reparar sus presuntos abusos. "No escucho eso de Roy Moore o Donald Trump", dijo.

El año pasado, poco antes de la elección, salió a la luz una cinta donde se escucha a Trump presumir de poder tocar a las mujeres aún sin su consentimiento. El presidente se justificó diciendo que no era más que una "conversación de vestidor".

En una encuesta difundida ayer por Fox News, la televisora aliada del Partido Republicano, el demócrata Doug Jones ya aparecía 8 puntos por encima de Moore, con 50% de las preferencias contra 42

Anoche, Trump, que no ha declarado mucho sobre las acusaciones contra Moore, se lanzó contra Al "Frankenstein" desde su cuenta de Twitter, asegurando que la fotografía en la que el hoy senador aparece tocando a la reportera mientras dormía en un vuelo "habla más que mil palabras".

"¿A dónde fueron sus manos en las fotos 2, 3, 4, 5 y 6 mientras ella dormía? Y pensar que apenas la semana pasada estaba sermoneando a cualquiera que quisiera escucharlo sobre el acoso sexual y respeto a las mujeres".

Pero los números no mienten. En una encuesta difundida ayer por Fox News, la televisora aliada del Partido Republicano, el demócrata Doug Jones ya aparecía 8 puntos por encima de Moore, con 50% de las preferencias contra 42 del ex juez, sobre quien pesan una decena de acusaciones de abuso a varias menores de edad a lo largo de varias décadas.

El 78% de los republicanos dijeron seguir apoyando a Moore, mientras que 13% dijeron que votarían por Jones. Aunque 13% suene como poco, Alabama es un estado en el que el hoy Fiscal General Jeff Sessions ganó la reelección al Senado con un aplastante 97.3%.

La diferencia más poderosa se ha visto en la preferencia de las mujeres. El 58% de las encuestadas dijeron que votarían por Jones, mientras que sólo 32% apoyaron a Moore. Apenas el mes pasado las que no apoyaban a Moore eran sólo el 39%, un incremento de casi 20 puntos en menos de un mes.

El triunfo en las primarias republicanas de Moore disparó el entusiasmo de los demócratas. Hoy NBC.com reportó que la campaña de Jones ha recibido en promedio 250 mil dólares al día en donaciones para derrotar al controversial juez desde que el escándalo se destapó.

McConnell consideró pedirle a Luther Strange, quien ocupa la curul de manera interina, que renuncie, lo cual podría disparar una elección especial dentro de varios meses

El liderazgo republicano, quienes nunca han querido a Moore y sólo lo apoyaron a regañadientes cuando ganó la elección interna, está buscando de manera desesperada una solución al dilema. Mitch McConnell ya ha pedido que Moore renuncie a la candidatura para abrir paso a un candidato independiente al que pueda apoyar el partido. El juez se ha negado argumentado que es inocente. Otra solución que contemplaron era postular como independiente a Jeff Sessions, quien ocupó dicha curul durante décadas, sin embargo, de acuerdo con reportes, el Fiscal General no está interesado en regresar a la cámara alta.

Por último, McConnell mencionó la idea de pedirle a Luther Strange, quien actualmente ocupa la curul de manera interina como reemplazo de Jeff Sessions, que renuncie, lo cual podría disparar una elección especial dentro de varios meses que les daría tiempo de encontrar otro candidato más presentable.

La gobernadora del estado, Kay Ivey, acabó con ese plan. Respondió que si Strange renunciaba simplemente iba a nombrar a un nuevo suplente que lo reemplazara de aquí al 12 de diciembre, el día de la elección.

Si las tendencias continúan como van, es probable que los republicanos pierdan una curul para antes de que termine el año. La última vez que un demócrata ganó una elección para senador por Alabama fue hace casi 30 años. 

El triunfo se sumaría a los que los demócratas se embolsaron a principios de noviembre, cuando se llevaron dos gubernaturas, varias alcaldías y curules en una elección que muchos vieron como un rechazo de las políticas y el discurso extremista de Donald Trump.