Desde hace varios años el cuadro Puebla FC vive una situación crítica y no solo  nivel futbolístico que por cierto, lo tiene peleando por no descender. Los problemas extra cancha son cada vez más fuertes e involucran a pesos pesados del empresariado mexicano, por ejemplo, Ricardo Salinas Pliego, poderoso mandamás del Grupo Azteca.

Ya desde el inicio del Apertura 2017, el equipo estuvo envuelto en una difícil situación económica pues la familia López Chargoy se quedó sin el apoyo del nuevo gobierno panista de Tony Gali  y es ahí donde entra en escena TV Azteca, quien bajo el pretexto de "apoyar" el duro momento que atravesaba el club, decidió adelantar una importante cantidad de dinero a cambio de los derechos de transmisión del conjunto camotero.

Ante la evidente falta de dinero de la familia López Chargoy que se quedó sin el apoyo del Gobierno de Chiapas y terminó con la desaparición del club Jaguares, también se quedó sin la ayuda gubernamental en Puebla y para evitar el mismo desenlace que tuvo el cuadro chiapaneco, decidieron aceptar la propuesta de TV Azteca que esta vez no solo le prestó dinero a los actuales dueños del club, sino que además se encargarían de la administración de todo lo referente al Puebla y de paso, se garantizaban varios años de transmisiones televisivas y además tener un equipo más en la Liga MX (TV Azteca ya tiene a Atlas, Monarcas y también administra a Veracruz), mientras le encontraban un posible comprador.

Gali, debe decirse, es un entusiasta impulsor de esta jugada en favor de Salinas Pliego. Sin embargo, los López Chargoy le prefieren vender el equipo a un grupo inversor dedicado al negocio de transporte. La familia aceptaría  que TV Azteca sea quien lleve el peso de la administración y operación del club mientras que los inversionistas encabezados por la empresa de autobuses Estrella Roja solo serían la cara visible de este entramado futbolero.

Para la Federación Mexicana de Fútbol la multipropiedad es un tema que parece no tener fin pues a mediados del 2013 advirtieron tras la compra del Atlas, que TV Azteca no podría tener más de un equipo y ahora tiene tres (sin contar que solo "administra" a Veracruz).