El problema estaba planteado desde hace semanas, cuando no hace meses. Muy raspado por el enfrentamiento con AMLO, Ricardo Monreal era una apuesta complicada. Sobre Macerlo Ebrard pesan todavía algunos señalamientos desde Los Pinos. Y a Lázaro Cárdenas lo veían "muy verde" aún.

La posición más importante de la nueva versión del "Gabinete Legítimo" de Andrés Manuel López Obrador no encontraba player. El ala zedillista, vinculada además a TV Azteca, comprendió que era el momento de iniciar el cabildeo.

LPO adelantó tiempo atrás el lobby que autorizó el propio Ricardo Salinas Pliego para intentar colocar a Esteban Moctezuma en la Segob. También las pláticas que existieron con Santiago Levy para convencerlo de que se haga cargo de la campaña económica desde la potencial Secretaría de Hacienda.

Desde anoche se instaló fuerte en el mundo político la versión de no será un hombre, sino una mujer la que hará campaña para la Segob: se trata de Olga Sánchez Cordero, la ex ministra de la Corte Suprema, que para sorpresa de nadie también está vinculada políticamente con Ernesto Zedillo.

Sánchez Cordero se convirtió en ministra de la Corte con la histórica reforma del zedillismo. Pero el currículum de Olga cuenta además con una particularidad: entró en la Constituyente del DF a través de las designaciones directas que tenía el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.

Es decir, la jurista ingresa por Mancera pero ahí adentro se da cuenta que tiene muchas coincidencias con la bancada de Morena, por lo cual después de unos meses decide firmar el Acuerdo que armaba en las plazas AMLO. Otro "colaborador" del mandatario capitalino que decide saltar a los brazos del tabasqueño. Como Miguel Torruco.

Si se confirmara este dato, no deja de ser una apuesta audaz y hay que reconocerla. ¿Cuántas apuestas a mujeres hubo desde la Secretaria de Gobernación? Aunque claro, el verdadero factor no es su género, sino sus nexos con el zedillismo.