Con alivio para los jugadores del sector energético, pero sobre todo para Carlos Treviño, al frente de Pemex y de Jaime Hernández, de la CFE, se evitó en la última ronda de negociaciones del TLCAN que Estados Unidos pudiera negociar el rol de estas empresas en el mercado.

De acuerdo con fuentes cercanas al proceso, citadas por el diario El Economista, Estados Unidos aprobó la posibilidad de que compañías privadas realicen alianzas con Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sin que las primeras sean consideradas como paraestatales.

El equipo estadounidense tenía la propuesta de acotar a empresas que se asocien con Pemex o la CFE en el marco de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Como explicó con anterioridad LPO, el proyecto que tenía entre manos el gobierno hablaba de: "reservar y fortalecer las inversiones, el acceso al mercado y las disciplinas empresariales estatales que beneficien a la producción y transmisión de energía".

Desde el sector, las lecturas apuntan al interés que reflejará el gobierno de Donald Turmp en las negociaciones por determinar el rol de Pemex y CFE en el mercado.

Esta propuesta bajaba los umbrales para calificar como empresa comercial del Estado y, al mismo tiempo, que la definición fuera más amplia. De esta forma, las empresas que se asociaran con la petrolera o la CFE quedarían bajo esta denominación, creando restricciones para ellas.

Cuando fue puesta sobre la mesa, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, lanzó críticas y cuestionamientos: "Imagínate lo que va a opinar Exxon y todos aquellos que han apostado a la reforma (energética mexicana) y han establecido inversiones conjuntas (con Pemex o la CFE)".

Así, el gobierno de México rechazó la iniciativa estadounidense desde que fue presentada en la tercera ronda de negociaciones del TLCAN. Conforme avanzaron las conversaciones, sobre todo en la Ronda 5.5, se perfiló la opción de recurrir mejor a lo que se conoce como Acuerdo de Cooperación Conjunta, que se trata de un joint venture temporal, basado en un contrato.

Tras la reforma energética en México, la petrolera egipcia Cheiron Holdings Limited, la australiana BHP Billiton y alemana DEA Deutsche han sido seleccionadas como socias de Pemex para explorar y extraer petróleo.

El gran objetivo de Treviño es lograr sumar más socios para la petrolera mexicana, sobre todo en los farmouts, como estrategia de lograr reestablecer las finanzas y operaciones que por años, han ido en picada.