El procurador Alberto Elías Beltrán dijo en las últimas horas, en una reunión de alto nivel dentro de la PGR, que no estarían dadas las condiciones para activar los resultados de la investigación sobre el affaire Odebrecht, que sacude  la política a lo largo del continente pero que en México todavía no tiene consecuencias tangibles más allá de la caída de algunos contratos de la compañía.

Según explicaron fuentes de la PGR a LPO, cuando a Elías Beltrán se le cuestiona internamente por este caso suele responder de mala manera y cree que quienes lo consultan son enviados por Arely Gómez, secretaria de la Función Pública que tuvo una historia tormentosa por este caso con Raúl Cervantes. Cerca del nuevo procurador genera paranoía el ahínco permanente de Gómez en la investigación.

Hay otros motivos de inquietud. Al parecer, Odebrecht estaría preparando con un consultor sudamericano una ambiciosa estrategia que incluye entregarle a los medios extranjeros el dossier que viene a confirmar que todo los gastos en los que incurrió a constructora Braskem (filial de Odebrecht) en proyectos con Pemex fueron avalados por el comité de adquisiciones de la empresa productiva. El documento irá acompañado de diversos mails que prometen nuevas emociones.

La empresa va a a exponer a la política mexicana en toda su dimensión y de ahí las prisas en la PGR para que se de cauce a las conclusiones que logró Cervantes antes de retirarse a un discreto segundo plano.