El año pasado millones de personas recibieron al nuevo presidente Donald J. Trump con la mega marcha más grande en la historia de Estados Unidos, en una histórica movilización contra el presidente que había asumido el cargo un día antes y a la que asistió LPO.

En enero de 2017 millones de personas recibieron al nuevo presidente con la mega marcha más grande en la historia de Estados Unidos. Bajo el título "Women´s March" se calcula que unas 4 millones de personas tomaron entonces las calles de ciudades y pueblos norteamericanos para protestar el arribo del nuevo inquilino de la Casa Blanca, quien tan sólo unos meses antes había sido acusado de acosar y abusar sexualmente de una veintena de mujeres a lo largo de las décadas.

Este sábado el fenómeno se repitió, justo cuando Trump enfrenta un primer aniversario en la Casa Blanca con gusto amargo: La aprobación del presupuesto naufragó en el Senado y podría obligarlo a cerrar temporalmente ciertos servicios del gobierno.

Trump tuvo que cancerlar las celebraciones que tenía preparadas en su club Mar-A-Lago de Florida, y tuvo que quedarse a lidiar con la suspensión del gobierno federal que comenzó justo a las 12 de la madrugada de hoy.

Este sábado Trump conmemoró su primer aniversario en la Casa Blanca cancelando las celebraciones que tenía preparadas en su club Mar-A-Lago, en Florida, y tuvo que quedarse a lidiar con la suspensión del gobierno federal que comenzó justo a las 12 de la madrugada de hoy.

Las protestas llegaron hasta Toronto, Canadá, donde miles de personas marcharon en solidaridad con sus vecinas norteamericanas.

Nuevamente miles de mujeres salieron a protestar al presidente, y aunque la asistencia no fue tan espectacular como el año pasado, y aún no salen estimados a nivel nacional, se calcula que en Nueva York -de acuerdo con cifras de la oficina del alcalde-marcharon unas 300 mil personas, mientras que en Los Ángeles, según el alcalde Garcetti, habrían sido medio millón de manifestantes.

La marcha de este año además vino acompañada del movimiento Me Too que durante 2017 unió a miles de mujeres alrededor del mundo para denunciar a sus acosadores y agresores sexuales, y que acabó con agresores sistemáticos como Harvey Weinstein, el otrora todopoderoso productor de Hollywood.

Uno de los discursos que alcanzó mayor viralidad fue el de la multigalardonada actriz afroamericana Viola Davis, quien habló desde el podio en Los Angeles sobre las devastadoras cifras del abuso sexual contra las mujeres.

"Una de cada 5 mujeres será asaltada sexualmente y violada antes de que cumpla los 18 años. Uno de cada 6 niños. Si eres una mujer de color y eres violada antes de los 18 años, entonces será 66% más probable que vuelvas a ser asaltada sexualmente. 70% de las niñas que son traficaras para sexo, son de color. Salen del sistema de [apoyo a los niños sin hogar]. Salen de la pobreza. Es una industria de un billón de dólares al año. Cuando entran al negocio del tráfico de sexo -y así le llaman: negocio-lo más probable es que sean violadas en grupo. Yo hablo hoy no sólo para las ´Me too´, cuando alzo la mano estoy consciente de todas las mujeres que siguen en silencio", dijo la actriz.

Trump respondió a las protestas con un tuit que muchos interpretaron como una burla al movimiento:

Hermoso clima en todo nuestro gran país, un día perfecto para que todas las Mujeres Marches. Salgan ahora y celebren los logros históricos y el éxito económico sin precedentes y la creación de riqueza que ha tenido lugar en los últimos 12 meses. ¡El nivel más bajo de desempleo de mujeres en 18 años!