Los partidos en el Estado de México empieza a definir sus candidatos, que definirán una nueva conformación política en la principal entidad del país. Los ojos posan, por supuesto, sobre el Congreso Local pero también sobre los principales municipios mexiquenses, que renovarán sus autoridades este año.

Un caso emblemático es Huixquilucan, unos de los municipios más importantes del área conurbada, hoy en manos del panista Enrique Vargas, un aliado incondicional de Ricardo Anaya. Se trata también del territorio que comandó en el pasado el propio Alfredo Del Maza, hoy gobernador.

Según pudo saber LPO, todas las encuestas marcan un favoritismo para Vargas, que va por la reelección. Acaso por ese motivo, en los últimos días hubo movimientos inesperados en el tricolor. Primero fue la sorpresiva renuncia de Pablo Peralta, hasta hace poco el virtual candidato del PRI.

Peralta García ya había pedido licencia como diputado local y se encaminaba a ser el postulante priista, pero el pasado domingo renunció argumentando "motivos de salud". Las versiones indican que el legislador viajaría a Suiza a realizarse un tratamiento.

En su lugar, ya se había inscripto el polémico Adrián Fuentes, quien fuera Secretario de Desarrollo Económico de Eruviel Ávila. Pero Fuentes tiene también en su currículum una controversial gestión en el municipio de Huixquilucan.

Fue presidente municipal desde 2006 a 2009, y a su salida fue señalado por dejar una enorme deuda de 750 millones de pesos. También se lo recuerda por las serias acusaciones tras la trágica muerte de 24 personas en La Marquesa, en donde según las investigaciones de la PGR habrían participado elementos de la policía municipal.