De concretarse el plan de Trump por imponer aranceles a la importación de acero y metal tendría una implicación en Altos Hornos de México (AHMSA), complicando aún más sus planes de regresar a colocar sus títulos en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

Desde hace un año se hizo público el interés de que la empresa que dirige Luis Zamudio volviera a cotizar en Bolsa, tras 18 años de ausencia, cuando debió declararse insolvente ante sus acreedores y contaban ya con el asesoramiento de Grupo Financiero Actinver.

El rumor que suena en el establishment de Coahuila, es que la activación de esta empresa se logrará con la participación de grandes empresarios de la región que han mostrado interés y que comparten con los directivos de AHMSA, su cercanía con el PRI. Estos empresarios serían quienes comprarían las acciones de la compañía una vez que esta emitiera obligaciones.

Miguel Riquelme, gobernador de la entidad, cree que la salida a Bolsa de esta empresa podrá reactivar empleos en el sector, el cual se vio muy afectado cuando estalló la crisis de 2015, consecuencia de la disminución de la demanda mundial, la sobrecapacidad, la caída en los precios del petróleo y la devaluación del rublo ruso, entre otros.

La amenaza de Trump, que podría materializarse la próxima semana, agrega ahora otro obstáculo para la firma coahuilense y de acuerdo con la Canacero, Altos Hornos de México (AHMSA), es ubicada entre otras tres empresas como las más afectadas.

La propuesta del Gobierno estadounidense es imponer impuestos de 25% a los productos importados de acero. Aunque los gobiernos de México y Canadá buscaron ser excluidos de la medida, el domingo Peter Navarro, Director de la Oficina de Política Comercial, negó que pudiera ocurrir esa posibilidad. Pero este lunes, el presidente republicano condicionó este pedido a la firma de un TLCAN "justo", al filo del cierre de la séptima ronda de negociaciones.

Guillermo Vogel, presidente de la Canacero, aseveró que si a México se aplican los aranceles, el gobierno de Enrique Peña Nieto debería responder de igual manera, pues la medida de la Unión Americana no sólo dañará las exportaciones de las empresas, también al mercado interno por una sobreoferta.