Los war rooms de José Antonio Meade y Andrés Manuel López Obrador celebraron la nueva encuesta de El Financiero, que finalmente se publicó la mañana de este jueves, una semana después de estipulado. El sondeo tiene algunos datos muy interesantes para ambos equipos de campaña, y otros muy negativos para Ricardo Anaya.

Según el estudio, AMLO finalmente perforó la barrera de los 40 puntos porcentuales -se ubica en 42% de preferencia-, lo que viene a confirmar que hubo un corrimiento del efecto "miedo" sobre su figura. El postulante de Morena creció cuatro puntos desde la anterior encuesta levantada en febrero.

En un desacople de lo que sigue ocurriendo con sectores empresariales, pareciera que en México ya se percibe un "riesgo" alrededor del tabasqueño. Como reveló este medio, ya se veía una caída robusta de su imagen negativa, que en cambio lo acompañó durante su campaña de 2012.

Por otra parte, a medida que pasan las semanas se instala más y más la idea de que será López Obrador quien ganará los comicios. Aunque la campaña oficial recién comenzará la semana que viene, el tabasqueño arranca con una ventaja de casi 20 puntos. Mucho margen.

Pero para Meade también hubo buenas noticias, porque después de los señalamientos respecto al lavado de dinero y las confusas compra-ventas de inmuebles de Anaya, por primera vez una encuestadora de nivel pone a José Antonio Meade en segundo lugar, en empate técnico pero por encima del Frente.

En la encuesta del Financiero, Meade obtiene 24% y crece dos puntos porcentuales desde febrero -la distancia con AMLO, sin embargo, se amplia dos puntos-. Pero lo que explica que el candidato del PRI pase a segundo lugar es en realidad el desplome de Anaya, que baja 4 puntos en apenas un mes.

En el PRI están convencidos que este movimiento responde a los efectos de las denuncias que empezaron a brotar hacia Anaya, sobre todo la última de sus vínculos con Manuel Barreiro, investigado por presunto lavado de dinero.