Primero fue el llamada "Grupo de los 50", el primer círculo de asesores de Andrés Manuel López Obrador, que trabajó su Proyecto Alternativo de Nación. La estructura se divida en cuatro grandes pilares: Política y Gobierno, Educación y Cultura, Pobreza y Desarrollo Social y por último Economía y Hacienda. Y de allí se desprendían subgrupos que estudiaban temáticas más específicas.

En esas reuniones, López Obrador desnudó uno de los proyectos más importantes de su eventual administración: para conseguir los 500 mil millones de pesos que atribuye a la corrupción debían, entre otras cosas, recortar mucho gasto corriente del gobierno para reubicarlo en inversión pública.

Más aterrizado, López Obrador aseguró que requería sólo 120 asesores de primer nivel -los tomadores de decisiones para áreas claves- y luego sólo 3,000 empleados operativos de la burocracia de rango medio-alto, que según sus cálculos hoy está en arriba de las 30 mil plazas.

Sus asesores afirman que sólo del 2012 al 2017 se crearon más de 25,000 plazas con un costo anual individual mayor al millón de pesos. El equipo de AMLO pretende aplicar un despido masivo el primer año de gestión de 8 mil empleados, que consideran posiciones más "políticas" que de necesidad real. "Sólo con esa medida conseguiría unos 8 mil millones de ahorro", aseguran en su equipo económico.

Por eso, la preocupación de seguir muy de cerca las contrataciones en este último año de gestión de Enrique Peña Nieto. En la última reunión del nominado Gabinete de AMLO, que se realizan generalmente los lunes -días que el tabasqueño se reserva para "descansar" en la Ciudad de México-, el tema salió en tono de preocupación.

Según pudo saber LPO, en el último encuentro, se conversó sobre las contrataciones fast track que Ildefonso Guajardo estaba realizando en la Secretaría de Economía, que ocuparía -en caso de ganar AMLO- Graciela Márquez Colín, esposa de Gerardo Esquivel, otro de los economistas históricos de Morena.

"Están usando el artículo 34 de la Ley de Servicios Profesionales de Carrera, que permite para casos excepcionales designar a un servidor público sin someterse al concurso de ley. Quieren dejar a un grupo de priistas ahí metidos y complicar nuestros planes", se quejaron en el encuentro, mientras debatían si ameritaba una denuncia pública.