Muy afectada la imagen de la administración de Enrique Peña Nieto logra un respiro con una serie de noticias que respaldan el discurso oficial de estabilidad macroeconómica. La primera buena noticia fue una mejora en la perspectiva crediticia de Moody's y ahora el resultado que tuvo la colocación de bonos en Japón, alcanzando la tasa más baja en la historia.

La tarde de ayer, la calificadora radicada en Nueva York anunció que cambiaba su perspectiva de ‘Negativa' a ‘Estable' hacia México, considerando un menor riesgo por el TLCAN y por las elecciones y mandó un mensaje de confianza: "Hay una baja probabilidad de que la próxima administración, a través de un cambio brusco en la política, debilite las tendencias económicas y fiscales", señaló en su documento.

Es una confianza en el mercado que ya comenzaba a visibilizarse, pues como explicó La Política Online, en medio de los nubarrones que significan la negociación del acuerdo trilateral y el ascenso de Andrés Manuel López Obrador -muy antagónico para el mundo inversor- en los mercados de tipo de cambio y accionario, sigue con cierta estabilidad.

El cuadro terminó de completarse con el anuncio que hizo este jueves la secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en torno a la conclusión de la la emisión de deuda en el mercado japonés, con la colocación de 135,000 millones de yenes o 1,260 millones de dólares en 4 bonos a plazos de 5,7,10 y 20 años.

Dichos bonos, conocidos como bonos samurái, otorgan un rendimiento al inversionista de 0.60%, 0.85%, 1.05% y 2%, que son mínimos históricos para este tipo de emisiones, como confirmaron analistas consultados por LPO, recordando también que en realidad, han sido pocas las emisiones por parte de instituciones mexicanas en el mercado asiático.

La dependencia que encabeza José Antonio González Anaya celebró que pese a la volatilidad observada en los mercados financieros internacionales, la transacción fue bien recibida por los inversionistas y se llevó en condiciones favorables.

La dependencia aseguró que esto se debe a que hay confianza por parte de los inversionistas internacionales "en el manejo macroeconómico y de las finanzas públicas del país", confirmando que participaron 95 inversionistas de distintos sectores del mercado japonés, con lo que se logró una demanda de 180,000 millones de yenes, equivalente a 1.3 veces el monto emitido.

Los analistas coinciden con esta apreciación. Arturo Carranza resaltó sobre todo que se logre concluir estas transacciones frente a la dificultad que representa levantar interés en los mercados asiáticos. "Son noticias que hablan de una solidez institucional de México", consideró.

Por su parte, Gabriela Siller, de Banco Base, recortó que los niveles en las tasas son bajas porque los plazos son más cortos, sin embargo, no impide que confirme que ese mercado tiene una percepción debajo riesgo hacia el país.