Como era de esperarse, el staff de Aurelio Nuño ya detecto la realidad de que Nuevo León es uno de los estados del país donde hay mayor presencia de voto cruzado contra José Antonio Meade. La aritmética que lleva el coordinador de la campaña tricolor es que el candidato está entre los 23 y los 25 puntos de intención de voto en Nuevo León. Y en paralelo observa que el PRI se encamina a retener Apodaca, Escobedo, Monterrey y Guadalupe, que Jorge Mendoza es competitivo para el Senado y que en la mitad de los distitos a diputado federal llevan mano los aspirantes del tricolor. "Están todos bien menos Meade, aunque después dicen que trabajan para él", soltó con amargura el pasado viernes Nuño en el bunker de la calle Tennyson, en Polanco, oficina generosamente cedida por el ex procurador Raúl Cervantes.

La explicación sería una fuerte estrategia de voto cruzado e la cual se les permite  las bases votar por Morena (porque dicen que o conectan con Meade) pero se les fuerza a votar por los candidatos locales.

Al mismo tiempo, tampoco le gustó a Nuño lo que pudo conocer de la última visita de Miguel Angel Osorio Chong a la entidad. Básicamente relatos que hablan de un coordinador de campañas al Senado más inquieto por refundar al PRI, o relanzar al partido que en juntar los votos necesarios en la corriente elección. También algún comentario sobre el fondeo de la campaña en el estado que es preferible omitir.

Otras postales de campaña. Hay cierto malestar entre Dante Delgado y Rafaél Moreno Valle. Sucede que el dirigente de MC le dio las candidaturas a Ivan Garza (para alcalde de Monterrey) y a Karina Barrón para el Congreso local  por pedido expreso del poblano con la promesa de que serían campañas con un atractivo mínimo de votos. Algo no salió como se esperaba porque Garza está en menos del 3% en Monterrey mientras que Barrón está abajo en su distrito local. 

Escenas cotidianas de la elección sampetrina. El ex coordinador ejecutivo del Estado Fernando Elizondo llama con insistencia desde hace una semana al padre de Miguel Treviño para convencerlo de que su hijo debe declinar en favor de Tato Elizondo. Un giro un tanto descabellado porque Treviño está muy arriba de Elizondo en los sondeos y además trae una campaña más estructurada mientras que Elizondo solo parece estar divirtiéndose. 

Los candidatos de MC están bajo fuego cruzado. El Universal reveló hace dos semanas que Samuel García tiene un familiar preso por nexos con el crimen organizado. Luego se filtraron supuestos pagos recibidos por Luis Donaldo Colosio Riojas y el fin de semana circularon con fuerza las facturas de los pagos a la encuestadora Massive Caller. El comentario es que ahora viene una denuncia potente sobre el financiamiento de las campañas. Nadie en el PRI se quiere hacer cargo de estos estiletazos. Es más fácil apuntar al Palacio de Cantera.

Siguen muy demorados los recursos estatales para que funcionen las nuevas fiscalías (General, Anticorrupción y Electoral). La explicación desde la oficina de Manuel González es que los recursos no se previeron en las leyes de presupuesto y de ahí la demora. Sin embargo Gustavo Guerrero -fiscal general -, ha deslizado que se debe a que el Gobierno estatal ya anda preocupado por algunas averiguaciones en curso.

Por cierto, en referencia a Guerrero y para terminar. El 10 de marzo hubo una ejecución en Valle Oriente, el 22 marzo otro asesinato en un restaurante del centro de Monterrey, el 6 de abril otro rimen en Centrito Valle en un restaurante y hace dos semanas una ejecución en San Pedro. De todo esto nada se sabe por parte del fiscal general (y el secretario de Seguridad Bernardo González). No hay personas sujetas a proceso ni mayores precisiones. Es casi como si no hubiera sucedido.