César Garza se mueve en el PRI de Nuevo León como una de las figuras con mayor intuición electoral y de gestión. Entiende y manifiesta que las presentes elecciones son un área de oportunidad para que el tricolor a nivel nacional comience un proceso de modernización al tener enfrente movimientos políticos que acaparan la escena. 

En entrevista para LPO, el candidato a la alcaldía de Apodaca señala los puntos clave para el crecimiento de un municipio altamente industrial que, señala, se vería en estado de incertidumbre ante la llegada de Morena al gobierno federal.

¿En tu equipo hay temor ante una eventual victoria de López Obrador?

El temor no solamente es para Apodaca, debería de serlo para el país completo. El problema fundamental es que, para quienes hemos dedicado parte de nuestra vida a la administración pública, sabemos que el modelo que se ofrece a los mexicanos es en sí un engaño. No es un modelo que se pueda cumplir en la realidad.

Por un lado, se mandan claros mensajes que intimidan y alejan al inversionista, a esa persona que invierte su capital para generar empleo y desarrollo. Ahuyenta a la comunidad internacional que ve contaminado nuestro régimen legal por posiciones políticas en temas como las reformas estructurales.

Eso, en el mundo se traduce a pérdida de confianza, recesión, inestabilidad en el tipo de cambio, y esos son los ingredientes perfectos para generar desempleo y falta de liquidez en la economía. Los signos que apuntan a señalar que López Obrador representa una amenaza para México no son clichés políticos, son realidades auténticas. La simple posibilidad de su triunfo ha inhibido inversiones.

Eso le preocupa a un municipio industrial. Apodaca es el mejor reflejo de la incorporación de México a la economía mundial porque aquí tenemos empresas internacionales. Por supuesto que nos preocupa, pero la decisión es de los mexicanos, sea cual sea, y esperamos sea la mejor.

 Los signos que apuntan a señalar que López Obrador representa una amenaza para México no son clichés políticos, son realidades auténticas. La simple posibilidad de su triunfo ha inhibido inversiones. 

¿Crees que después del primero de julio el PRI necesite de una restructuración a nivel nacional?

Definitivamente. El PRI es un partido que ha construido instituciones sólidas fuertes. No se podría explicar el México contemporáneo sin la aportación del PRI, pero debemos de reconocer que los partidos políticos tienen que acreditarse día a día. No podemos vivir de nuestra historia, tenemos que convertirnos en un partido moderno, en una opción viable para la gente de hoy.

La gente demanda perfiles más preparados de parte de sus servidores públicos. Yo confío en que, si hay un movimiento político en México que tiene la capacidad de reinventarse y de reconfigurarse para ser una opción fuerte con miras al futuro, es el PRI. No tengo duda de que el mensaje que los ciudadanos manden en las urnas va a ser fielmente interpretado por el partido y vamos a recomponernos para representar una opción más fresca y más acorde al México de hoy.

LPO/Javier Alcántar

¿Cómo valoras la labor de René Juárez en este nuevo parado?

A mí me parece que René Juárez representa la pasión del priismo. Es un líder que está centrado en la gente, es un líder de estructuras nacionales pero que tiene un discurso muy local; le habla al militante, no le habla al dirigente.

Sus discursos son para que le lleguen al ciudadano, uno de los fundamentos que se olvidaron en los últimos años. No hay política que no sea local, la fuerza del PRI es el seccional, es la colonia, es el barrio; un vínculo con el pueblo. No los acuerdos corporativos de gran envergadura nacional.

Pareciera que con la llegada de Juárez, el tricolor aleja un poco la visión tecnócrata y regresa a sus principios de cercanía a la localidad.

Es de gran importancia que el partido esté cercano a la gente y que tenga esa estructura sólida. Vemos por ejemplo a Morena, que no es más que una masa confusa de los grupos de traidores de los principales partidos y de una clase política radical que ha criticado, pero nunca ha ejercido ni propuesto.

Tú miras las asambleas locales de Morena y observas que terminaron en credenciales quemadas, sillazos, violaciones a los estatutos. Sus modos corresponden a la jungla que se conformó de gente que dimitió de los partidos políticos.

En esto también hay que reconocer que los partidos políticos tradicionales se han acartonado. Se volvieron cúpulas que dominan unilateralmente las decisiones y se divorciaron de la base.

¿Cuales son las principales áreas a trabajar de Apodaca?

Compartimos junto con el resto de los municipios del área metropolitana la problemática número uno que es la inseguridad. Pareciera que en los últimos tres años, el gobierno independiente de Jaime Rodríguez abandonó la coordinación que fue la estrategia fundamental con la que se logró reducir los indicadores de conflictividad.

En Apodaca tenemos dos labores principales a atacar: el mantenimiento de nuestras vialidades, y la movilidad y el transporte. Esos temas están en la agenda de la ciudad, el 95 por ciento de las peticiones ciudadanas tienen que ver con estos temas fundamentales.

 No tengo duda de que el mensaje que los ciudadanos manden en las urnas va a ser fielmente interpretado por el partido y vamos a recomponernos para representar una opción más fresca y más acorde al México de hoy. 

¿Qué hay que trabajar en materia de seguridad?

Hay que empezar por entender y comprender a la delincuencia como un problema social. El 80 por ciento de los delitos que se cometen en Apodaca relacionados al robo a peatones, robo a casa-habitación y robo a comercio se cometen por personas de entre 16 y 24 años.

Tenemos claramente un problema de integración juvenil como causa número uno de conflictividad y criminalidad en Apodaca. Por eso es que nuestra primera acción tiene que ver con promover deporte, educación, empleo y atención profesional a jóvenes con problemas de adicciones. Esa será nuestra primera gran estrategia de prevención.

Hay que reconocer que aún y que la sociedad ofrezca estas herramientas de prevención, hay grupos importantes de la población que escogen un modo desordenado de vivir. Para ellos, hay que tener una policía preventiva eficaz. Nuestra oferta es guardias de proximidad.

Quiero acreditar mis credenciales y las contrasto con las de mis adversarios. Por mucho, soy el servidor público con más experiencia entre los competidores. Soy el único que ha sido alcalde no sólo de Apodaca, sino de otro importante municipio como lo es Guadalupe, y en las dos gestiones he tenido resultados particularmente buenos en el tema de seguridad.

Cuando fui alcalde en el 2003, Apodaca era considerado el municipio más seguro de la zona metropolitana. Tenía los niveles de conflictividad por habitante más bajos de la zona metropolitana.

Como alcalde Guadalupe, llegué en el 2012 en medio de una de las peores crisis de seguridad en el municipio. Con el esquema de guardias de proximidad bajo el mando de militares, logramos una reducción promedio en delitos patrimoniales de más del 60 por ciento en los tres años.

LPO/Javier Alcántar

¿Cómo dar una mejor al sistema de movilidad en el municipio?

La idea de la movilidad es que queremos mover personas, no carros. Si no nos planteamos bien el asunto, nunca lo vamos a resolver. Las ciudades modernas que resuelvan ese problema es porque diseñan la estructura para mover gente, no para mover vehículos. Esto se empieza con un buen sistema de transporte masivo colectivo.

Apodaca es un municipio particularmente abandonado por el estado. Somos el tercer municipio más importante en población y en 5 años seremos el segundo más grande de Nuevo León. Somos el municipio industrial de la zona metropolitana; aquí tenemos 90 parques industriales que le dan empleo a más de 200 mil personas, y somos la sede de los dos aeropuertos internacionales de nuestro estado.

En todas las ciudades metropolitanas del mundo, el metro es un destino obligado al aeropuerto y a la zona industrial. Pues bien, en Apodaca la línea 3 del metro originalmente llegaría hasta el aeropuerto, pero por razones presupuestales y la negligencia de la gestión que ha mostrado el gobierno estatal actual lo ha frenado.

Esperamos que a mitad del año entrante se termine la línea 3 hasta el Hospital Metropolitano, y así nos encargaremos de asegurar las los ciudadanos de Apodaca que lleguen tres nuevas líneas de transmetro a nuestra ciudad.

Hablando de la administración estatal, ¿con qué nivel de gobernabilidad regresaría El Bronco luego de las elecciones presidenciales?

Más nos vale a todos los que resultemos electos unirnos para darle a Nuevo León condiciones de gobernabilidad, porque un gobernador débil y un estado sin gobernabilidad lo padecemos todos. Se daría como consecuencia gestiones municipales grises e intrascendentes, y no nos permitiría cumplir nuestras propuestas con los ciudadanos.

Por el bien de todos, una vez que el gobernador decidiera regresar, al menos en un servidor va a encontrar a un aliado para la gobernabilidad para retornar a la agenda pública de avanzar en materia de seguridad, de coordinación y de movilidad. Por el bien de todos, nos conviene generar condiciones de gobernabilidad.