El próximo Gobierno hará uso de la reforma energética tal cuál está estipulada en la ley, afirmó Rocío Nahle, la propuesta de Andrés Manuel López Obrador para encabezar la Secretaría de Energía, no obstante, aclara que no abandonan su plan de que el Estado siga teniendo un papel "no de control", pero sí de "intervenir responsablemente".

Del proyecto de Gobierno de López Obrador, el que más cuestionamientos genera -a todo nivel- es el energético. Ahí, se incluye la ambiciosa propuesta de bajar los precios de los combustibles mediante el incremento de la producción petrolera a través del desarrollo de refinerías.

De acuerdo con la futura administración, en tres años estarán modernizadas las seis refinerías existentes, "el primer paso" que tomará el equipo energético del tabasqueño. "Y en tres años comenzaremos la construcción de la primera refinería", asegura Nahle. Aunque aún queda en el aire la pregunta que gira en torno a los recursos que se utilizarán para lograrlo.

Diversos especialistas han recordado la endeble salud financiera de Pemex, por lo que descartan que pudiera provenir de las arcas de la petrolera que hoy dirige Carlos Treviño y si acaso se apostara por la inversión privada, aseguran que en el mercado las refinerías no son el negocio más atractivo para los inversionistas petroleros.

A pesar de ese detalle, los futuros encargados del plan energético de México insisten en que a través de este despliegue se podrá tener autosuficiencia energética y se mantendrá un control de precios en los hidrocarburos.

Por lo pronto Nahle señala que Pemex debe hacer una distribución de su presupuesto e invertir más en exploración y producción. "Hay una alta burocracia y gastos efectivos, y se ha dejado de largo la inversión en ese aspecto. hay que buscar yacimientos", agrega en una entrevista radiofónica con Luis Cárdenas la mañana de este martes.

En este sentido, lo que deja claro la futura funcionaria es que la reforma energética continuará: "Vamos -como Estado- a explorar y explotar yacimientos que están ubicados, independientemente de los 105 contratos que ya están otorgados y que deben producir". Se refiere a los licitados en las rondas petroleras.

Pero agrega: "Nosotros tenemos que avanzar, no nos podemos quedar a esperar qué pasa o cómo juegan externos sin tener una participación responsable de Estado, para generar valor agregado, seguridad energética. Hay que retomarla con la legislación que hay. Se va a aprovechar lo que se tiene. Si empezamos a barrer hacia atrás, no vamos a construir".

Además, reconoció que la relación público-privada ha sido buena y hay que aprovecharla. En ese sentido, por ejemplo, agregó que los privados podrán seguir importando energéticos, como lo establece la ley. Pero cabría recordar que en el discurso del este gobierno que arrancará en diciembre, ha insistido en que se revisarán los contratos adquiridos. 

Sobre la promesa de reducir los precios de las gasolinas se mostró prudente, evitando dar un estimado de cuánto podrían bajar y es que recuerda que hay factores como la inflación, fugas, robo y que antes que nada, deben darse garantías a los propios gasolineros.

"No me gustaría dar un número porque estaría especulando pero tenemos toda la voluntad de producir en México", señaló.