Los primeros días de Jaime Rodríguez Calderón en su regreso a Nuevo León los dedicó a una revisión integral de su equipo de Gobierno para de ese modo proyectar el segundo tramo de su administración estatal.

En sus conversaciones con propios y ajenos el gobernador capitaliza dos puntos de su experiencia de candidato presidencial. Por un lado, ha recordado a diferentes capitanes del poder económico que contrario a lo que se especulaba no solo no declinó por AMLO, sino que lo cuestionó hasta el final de la campaña.

El segundo aspecto, que lo conversó con algunos alcaldes ganadores de su elección, es que entiende que fue responsable en todo este proceso, porque dejó el gobierno estatal en manos de Manuel González y este tuvo un rendimiento aceptable y de consensos.

Justamente con González fue la encerrona para definir cambios que se darán a conocer entre mañana miércoles y el jueves. Ya está definido el nuevo Secretario de Economía. De no haber cambios, el reemplazo de Fernando Turner llega desde afuera del organigrama actual y tiene la misión de sostener los buenos indicadores macro que exhibe Nuevo León en materia de inversión, empleo y recaudación.

También habrá cambios en Desarrollo Social, donde actualmente reporta Eugenio Montiel (ex diputado del PRI que luego se hizo independiente) quien tendría un nuevo destino en la administración actual.

La Secretaría de Enlace con la Federación es otro despacho donde habría modificaciones. Allí reporta Jorge Arrambide, muy cercano a Fernando Elizondo, quien dejó el Palacio de Cantera a mediados del año pasado.

Por otra parte, Carlos Garza sigue al frente de la Tesorería. El funcionario, reconocido por la IP y por los partidos, queda ratificado en su cargo tras semanas de especulaciones sobre su posible salida.