El Gobierno de Enrique Peña Nieto planeaba concluir en materia energética con las dos últimas licitaciones de la Ronda 3 -que incluía yacimientos no convencionales- y siete farmouts para Pemex, pero hubo un giro en el análisis de Pedro Joaquín Coldwell y solicitó un cambio en el calendario.

La petición del secretario de Energía fue aceptada este miércoles por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) que encabeza Juan Carlos Zepeda, de tal forma que estos proyectos quedarán en manos de la administración de Andrés Manuel López Obrador, pues se pospusieron hasta 2019.

Luego de los éxitos de estas licitaciones y ante las amenazas del futuro Presidente sobre la reforma energética, el Gobierno optó por acelerar los procesos. Todo parecía indicar que amarraría así un mayor número de inversiones privadas y se esperaba para octubre esta tanda de concursos.

Pero bajo el argumento de que se promovería la participación de un mayor número de licitantes, Coldwell solicitó que el acto de presentación y apertura de propuestas se llevara a cabo en el primer bimestre de 2019 y estos eventos ahora ocurrirán el próximo 14 de febrero.

Así, el calendario estipula que el cierre de acceso al cuarto de datos e inscripción será el próximo 8 de enero del año entrante. La recepción de documentos será del 9 al 10 de enero y del 11 al 29 de ese mes será la precalificación.

Conforme a este nuevo calendario, la publicación de la lista de interesados precalificados será el próximo 30 de enero, la publicación de bases actualizadas será el 6 de febrero y el limité para resolver conformación de licitantes el 11 de dicho mes.

El último paquete de clústers en aguas someras que se abriría al mercado privado para asociarse con Pemex era clave para apoyar a la desgastada petrolera mexicana que sufre por la debilidad en sus números y sus operaciones, por lo que se esperaba con fuerte expectativa.

Para septiembre además, se estimaba las últimas dos licitaciones de la Ronda tres, que incluirá la subasta de campos no convencionales, es decir, gas shale. se trata de una subasta de nueve áreas en el norte de Tamaulipas (cuenca de Burgos) generaría alrededor de 2,343 millones de dólares y más de 23,000 empleos directos e indirectos, beneficiando de manera directa a los municipios de Méndez, Burgos, San Fernando, San Carlos y San Nicolás, en caso de adjudicarse el 100%.

Esta decisión acaso incrementará la presión del mercado sobre AMLO en el rubro energético. Hay que tener en cuenta que las agencias calificadoras Moody's y Standard and Poor's han dicho que las medias que tome en esta materia serán clave para su calificación y perspectiva, considerando que algunos puntos generan preocupación, como la construcción de nuevas refinerías y la revisión de contratos petroleros, que apuntan podría alargar los procesos.