La Policía Federal detuvo al empresario Héctor Zabaleta, mano derecha de Paolo Rocca durante décadas, acusado en los cuadernos de la corrupción kirchnerista de ser quien pagaba las coimas en nombre del grupo a Roberto Baratta, el funcionario de Julio de Vido encargado de las cobranzas a los empresarios de la obra pública.

Zabaleta fue durante años nada menos que el máximo responsable de administración del grupo y su cercanía a Rocca es conocida en el mercado. La detención no pasó desapercibida en el mercado: Las acciones de la empresa privada más importante del país en Wall Street y en el mercado local.

La caída de Ternium, la empresa más importante del grupo, fue de un impactante 9,07% y arrastró al Merval que este lunes cayó un 0,39 por ciento.

Esta medida dispuesta por Bonadio representa un hecho político de primera magnitud. Techint es por lejos la empresa privada más importante y de mayor peso político del país y tiene una relación muy cercana a la administración de Macri, a la que acercó decenas de funcionarios. Entre ellos están el secretario de Empleo del ministerio de Trabajo, Miguel Punte; Javier Ibáñez, del Inti y el titular de Enarsa, Mario Dell'Acqua, que viene de Aerolíneas.

En los cuadernos en los que relata la ruta de las coimas que cobró el kirchnerismo, Centeno menciona a la empresa de Rocca en nueve ocasiones y en todas aparece un tal "Héctor", acercando los bolsos llenos de dólares a Baratta en los subsuelos de la torre de la calle Della Paolera, donde el grupo tiene su sede central.

LPO anticipó  en su momento que el juez federal Claudio Bonadío sospechaba que el "Héctor" mencionado por Centeno era Zabaleta. El grupo que conduce Rocca intentó desligarse del caso abriendo una "investigación interna" y afirmando que Zabaleta ya no trabaja en Techint. El tema es que los hechos investigados se inician en el 2008.

El holding que conduce Rocca había sido parte de la primera serie de allanamientos que dispuso Bonadío. Este lunes el juez federal avanzó contra el grupo empresario más poderoso del país y ordenó la detención de Zabaleta en su domicilio de Villa Urquiza, pero por ahora no ha llamado a declarar a Rocca, jefe directo del encargado de pagar las coimas, según el relato de Centeno.

Ternium aparece en los cuadernos de los moches del kirchnerismo

Techint, una de las pocas empresas globales de la Argentina, arrasta escándalos similares en los distintos países en los que opera, generalmente bajo la marca Ternium. En Brasil, quedó involucrada en el Lava Jato, sufrió allanamientos y fue suspendida del registro de empresas de obra pública. Y en Perú también quedó involucrada en el escándalo de la construcción del gasoducto de Camisea y figura entre los aportantes al ex presidente Pedro Pablo Kuczynski, que acosado por ese escándalo del que también participó Odebrecht, tuvo que renunciar.

En Brasil, las investigaciones del juez Sergio Moro llegaron hasta Italia, la otra base del grupo que conduce Rocca. Allí, el fiscal Fabio di Pasquale investiga la venta de tubos sin costura -el producto estrella de la firma- a Petrobras por US$ 1.600 millones, operación en la que se habrían pagado en coimas por US$ 9,4 millones entre 2009 y 2013.

Di Pasquale viajó a la Argentina para tomarle declaración a Rocca y avanzar con otras medidas de prueba como el secuestro de correos electrónicos y registros de llamadas del dueño de la empresa y otros miembros de la cúpula de la compañía, pero las trabas que encontró en el país le impidieron avanzar.

Por eso, la detención de Zabaleta marca un quiebre en la historia de la compañía que hasta ahora había logrado salir bastante indemne de distintas investigaciones.