La resolución del Tribunal Estatal Electoral de revertir las elecciones de Monterrey y Guadalupe cambiaron los planes del dirigente nacional Damián Zepeda, quien ya concentra su agenda exclusivamente en el movimiento de los candidatos panistas que reclaman una injusticia interpuesta por los magistrados.

Cientos de simpatizantes y albiazules se han reunido esta tarde en las inmediaciones del Palacio Municipal de la capital regiomontana en promesa de un plantón permanente hasta que sea revertida la resolución que se dio en dos de los municipios clave que ahora pasan a manos del PRI.

Ahí, Felipe de Jesús Cantú, hasta ayer alcalde electo de Monterrey, aseguró que permanecerá hasta que una instancia electoral le reconozca el triunfo que la Comisión había entregado por mayoría de votos a los panistas. Junto a el, muy de cerca se mantiene el operador y ex gobernador Fernando Canales, quien acusa de amaño a los magistrados que votaron el revés.

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Pedro Garza, quien también reclama su victoria en Guadalupe, señala que el partido buscará el juicio penal y político contra los tres integrantes del TEE, mientras que Zepeda ya cabildea en las instancias regionales y federales para recuperar el triunfo que señala, se dio en las urnas con la mayoría de los votos ciudadanos. Durante los próximos días buscará reunirse con las figuras del Tribunal Federal.

Al interior del panismo apuntan que los magistrados no han dado una explicación detallada de las razones que tuvieron para revertir las victorias, pues no han explicado las razones por las que anularon votos ni cuáles fueron las casillas donde hallaron irregularidades.