Si bien el equipo mexicano que negocia en Washington en las mesas por el TLCAN mantiene una postura positiva sobre la integración de Canadá en los días próximos, el análisis externo no lo es tanto y más de uno habla de que podría no ocurrir así. En ese escenario, Ildefonso Guajardo reconoció que el acuerdo con Estados Unidos tampoco está garantizado.

Tanto el secretario de Economía como el de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray, afirman que para esta semana Chrystia Freeland se podría unir a las discusiones, de tal suerte que para finales de noviembre Enrique Peña Nieto participaría en la firma del renovado tratado trilateral, aunque ya su ratificación quedaría en manos de los Congresos de los tres países en 2019, es decir que en México, prácticamente quedaría en canchas de Morena.

Ese, es el escenario más optimista para el actual Gobierno mexicano. Aunque Videgaray reconoce que hoy en día la relación más tensa para Estados Unidos se concentra en Canadá, confió llegar a dicho calendario, lo mismo que Guajardo: "Hay todas las bases, hay mucha confianza de un acuerdo trilateral".

¿Y si no? Consultado al respecto en una entrevista radiofónica para MVS Noticias, el encargado de estas negociaciones reconoció que si Canadá no se une, "se tendrá que ajustar el acuerdo con Estados Unidos, por ejemplo, en reglas de origen para el sector automotriz, que está diseñado para el beneficio de los tres países", sin embargo acotó que al ya conocer la ruta de negociación, "no sería una batalla campal".

Clave también es tener en cuenta la postura del congreso estadounidense, pues el acuerdo con Trump era negociar un tratado trilateral, no bilateral, por lo que si él quisiera formar con México un solo acuerdo, también tendría que pedirle permiso al Senado nuevamente. 

Mnuchin cree que esta semana se podría alcanzar acuerdo con Canadá por TLCAN

Aunque por lo pronto, Luis Videgaray afirma que este ha sido un paso importante ante la preocupación que había en el sector empresarial. "Muchas inversiones se detuvieron por esta incertidumbre, muchas empresas no contrataron trabajadores. Ese es el valor de este acuerdo, que tiene un impacto no solamente en los grandes números. Si no se hubiera logrado un acuerdo hubiera habido un impacto bien grande sobre la economía mexicana", explicó el canciller mexicano entrevistado este martes.

Afirmó además que este acuerdo fue un "ganar-ganar" en donde aseguró que en "en muchos casos, la posición de EU se tuvo que flexibilizar. Ambas partes estamos contentos" y agregó que los tiempos "todavía dan para que pueda ocurrir el acuerdo en noviembre", reconociendo el respaldo del equipo de transición.