Para agosto el mercado volvió a revisar sus pronósticos sobre algunos indicadores de la economía, sin embargo sobresalió el pesimismo, sobre todo al conocer los desalentadores datos del comportamiento del PIB durante el segundo trimestre del año, por lo que volvieron a hacer importantes ajustes a sus expectativas.

En los últimos días de agosto, el INEGI confirmó la caída del Producto Interno Bruto (PIB) en el periodo de abril a junio de -0.1% en contraste con el trimestre anterior y un avance de 1.6% frente al mismo periodo pero de 2017, esto por menor inversión -provocada por la falta de inversión- y menores exportaciones, principalmente.

Y por el lado de la inflación también se mostraron datos alarmantes, pues en el último indicador se vio un crecimiento mayor al esperado de 4.8% a tasa anual.

En ese contexto, el pesimismo se vio reflejado en las expectativas de los especialistas en economía del sector privado, pues para agosto consideraron que la economía crecería solo 2.14% y no 2.25% como esperaban en julio, que ya entonces hacían un ajuste también a la baja desde 2.29%.

En cuanto a los precios al consumidor, su pronóstico es menos optimista que el del Banxico, pues mientras dicho órgano comandado por Alejandro Díaz de León considera que este año se ubicará en 4.2%, en el mercado apuntalan a un 4.41% desde el 4.23% que habían estimado el mes pasado.

La incertidumbre por el TLCAN y políticas de AMLO bajan los pronósticos de Banxico

Para 2019 también ven con dificultad que se logren las metas del banco central, pues mientras ahí hablan ya de un descenso hasta el 3.3% (lo que lo acerca a que para el 2020 logren su meta histórica de 3%), en la encuesta más bien luce una expectativa que ronda el 4%, ubicándose la media en una tasa anual de 3.74%.

Resalta que en las preocupaciones del mercado ha crecido el rubro de Gobernanza, con un repunte importante en la falta de estado de derecho, como una alarma de riesgo para el crecimiento económico.

En mayor escala, al mercado le preocupa también como choque en contra las condiciones externas, en especial, política sobre comercio exterior. Hay que considerar que esta encuesta se levantó antes del 29 de agosto, cuando aún parecía haber expectativas de que podría alcanzarse un acuerdo el pasado 31 entre Canadá y Estados Unidos, para así, avanzar en el TLCAN. No ocurrió y es probable que para el siguiente mes, los analistas incorporen ese análisis a sus proyecciones.