Empezaron las negociaciones. Ricardo Monreal ya se sentó por separado con cada uno de los coordinadores en el Senado. LPO ya había anticipado que les había comunicado que se reservaría el control absoluto de la Jucopo durante los seis años, pero sí está dispuesto a ser más generoso con la Mesa Directiva y el reparto de comisiones.

Como suele ocurrir con cualquier negociación, los jefes de la oposición arrancaron con pedidos bastante ambiciosos para el número de senadores que representan. Con sólo 13 senadores, Osorio Chong buscar controlar comisiones clave como Gobernación, Puntos Constitucionales o Seguridad, temas que lo apasionan.

Damián Zepeda se auto-designó para controlar la segunda bancada más numerosa, con 24 senadores azules. Por eso dice entre sus subordinados que exigirá comisiones de nivel, como Hacienda o Relaciones Exteriores. Son las negociaciones más complejas, porque la renovación del CEN en el PAN podría incluir su remoción como coordinador.

Miguel Ángel Mancera, en cambio, fue bastante astuto para las peticiones de su mini-bancada. El ex Jefe de Gobierno le avisó a Monreal que no quiere ninguna comisión importante, sólo busca quedarse con el control del Instituto Belisario Domínguez.

El pedido de Mancera tiene sus beneficios: el Instituto cuenta con robustos fondos, contratos y visibilidad mediática. Juan Zepeda le pidió que peleé la comisión de Desarrollo Social en su nombre.

Por supuesto, los pedidos de todos los coordinadores tienen una contraprestación: colaborar en el primer año del sexenio de AMLO, en donde será clave el apoyo de las bancadas de oposición para conseguir una mayoría calificada en reformas constitucionales.

En los pasillos del Senado se comenta que este fin de semana habrá una nueva ronda de pláticas, porque a más tardar el martes o jueves se quiere anuncia la conformación de todas las comisiones ordinarias.