A puerta cerrada, Porfirio Muñoz Ledo recibió al próximo secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, y a su asesor en materia de seguridad, Alejandro Gertz Manero, para detallar el operativo de seguridad que se desplegará en el recinto de San Lázaro el próximo 1 de diciembre para la investidura presidencial de Andrés Manuel López Obrador.

"Todas las tomas de protestas han tenido su tono, su circunstancia política, su entorno social. Esta [con AMLO] va a ser distintas a las anteriores, porque es un acto refundacional de la República. Esta será muy cuidada, van a venir, todavía no sabemos cuántos jefes de Estado", declaró Porfirio al término de la reunión. "Será una ceremonia bien manejada, austera, muy austera, y muy solemne, es la refundación de la República", agregó.

Durazo Montaño llegó junto con de Alejandro Gertz Manero, asesor en materia de seguridad de López Obrador; César Yáñez, el conocido ex coordinador de Comunicación de Morena y eventual coordinador general de política y gobierno; Alejandra Frausto, próxima titular de la Secretaría de Cultura; y Alejandro Esquer secretario particular de AMLO. Mientras que Muñoz Ledo tuvo la compañía del secretario general de la Cámara de Diputados, Mauricio Farah Gebara, y el secretario de Servicios Parlamentarios, Juan Carlos Delgadillo.

Por la fuga de los "pesos pesados", Delgado busca en su bancada perfiles para presidir comisiones

Igualmente, el legislador federal de Morena indicó que en el encuentro se abordó "la logística" que se implementará en el evento, tomando en cuenta la entrada y salida de invitados, para que todo salga de la mejor manera. Abundó que la seguridad al interior de la Cámara de Diputados la realizará con los medios del propio órgano legislativo y la que se implemente fuera de ella corresponderá a otras autoridades.

"Aquí nos vamos a manejar con nuestros propios medios, y lo de la calle ya no es nuestro problema, la logística para los jefes de Estado afuera de aquí, ya no es nuestra competencia", indicó el diputado federal de Morena. "No esperamos trastornos, la seguridad es preventiva -continuó-. No vemos por ningún lugar, ningún trastorno que pueda pasar, no vemos ninguna clase de peligro. El pueblo sabe comportarse correctamente y no vemos que vaya a ver un asalto al recinto".