La inflación en junio volvió a ubicarse en el rango del Banco de México, pues en su tasa anual se ubicó en un nivel de 3.95%, pues los energéticos y los productos agropecuarios perdieron terreno. El dato vuelve a instalar en el mercado la probabilidad de un recorte en tasas.

Durante dicho mes, la inflación mostró una variación mensual de 0.06%. La mayor baja provino de la inflación No Subyacente, en donde los precios de las frutas y verduras mostraron una reducción de 1.58% (la cebolla, el jitomate y el limón representaron las mayores bajas) y los energéticos de 1.55%. Aquí, el Gas doméstico LP retrocedió hasta en 5.67% mientras que la Gasolina en 0.71% frente a mayo.

De acuerdo con el análisis de Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base, estos datos tuvieron cierto efecto en el avance del peso al arranque de esta jornada, ubicándose en los 19.89 pesos por dólar, aunque ha ido ganando terreno durante la jornada. El movimiento del tipo de cambio se debe principalmente a la espera en el mercado sobre nuevas señales por parte de la Reserva Federal (Fed) en cuanto a su política monetaria. La expectativa es si dará certeza sobre mantener o recortar la tasa de interés.

Bronca en la 4T porque Heath no apoyó el pedido de Esquivel para bajar la tasa de interés

En México, estos los resultados inflacionarios también vuelven a generar el debate sobre si Banxico debería seguir esta última ruta. En opinión de Siller, sí eleva las probabilidades de que el equipo que encabeza Alejandro Díaz de León se incline por un recorte en las tasas de interés, que hoy se ubica el referencial en 8.25%.

Es un debate que ya se instaló en Banxico. Según pudo saber LPO, fue Gerardo Esquivel quien impulsó esta acción, la cual, como se sabe, no fue respaldada por sus compañeros. 

El argumento del subgobernador es precisamente los niveles que está alcanzando el indicador de precios, acercándose a la meta del banco central, mientras que la economía se mantiene en el estancamiento. Los argumentos serán precisados este jueves, en la minuta que dé a conocer el organismo sobre su última junta de junio.

Aunque un escalamiento de la inflación no está del todo descartado por los especialistas. En el análisis de Siller, preocupa el comportamiento de la inflación subyacente, que es donde se tiende a observar un mayor traspaso de un incremento en el tipo de cambio a los niveles de los precios, pues este sigue incrementando. A nivel anual el alza fue de 3.85% -frente al 3.77% que mostró en mayo respecto a 2018-. El temor es que la volatilidad en los mercados no se disipa, en tanto que se mantienen las tensiones comerciales en el mundo y en México continúa la desconfianza empresarial.