A cuatro años de que se abrió el mercado de Fibras en México y en un contexto donde aún no se tiene total conocimiento sobre cómo funciona este instrumento, el Gobierno Federal se aventura a lanzar su propio fideicomiso para incentivar la inversión, con un esquema absolutamente novedoso, lo cual genera dudas de cómo podrá funcionar entre los analistas, aunque también ven un elemento del cual empresas como Pemex y CFE podrán sacar provecho.

El día de ayer, el gobierno anunció que va apostar por este instrumento y presentó “Fibra E” dentro de los diez puntos presentados por el presidente Enrique peña Nieto dentro de su tercer informe de gobierno.

“Con él, los inversionistas participaran en proyectos en materia energética y de infraestructura en condiciones similares a las que ofrecen las fibras inmobiliarias que han sido muy exitosas en los últimos años”, aseguró el mandatario, sin ofrecer más detalles al respecto.

Precisamente, esta característica llama la atención de los analistas, pues como bien indica el nombre de estos fideicomisos, han estado enfocados en el sector de bienes raíces, por lo que el hecho de que se lance uno pensado en infraestructura genera algunas dudas.

Sobre el tema, LPO consultó al analista Roberto Solano, de Monex, quien señaló que “al mercado mexicano le ha llevado tiempo entender el sector de Fibras cotizando en la bolsa, no es un vehículo tan fácil de entender en alguna de sus metodologías” por lo que consideró que a este proyecto le llevará “una curva de aprendizaje”, aunque señaló que es un vehículo interesante y tiene catalizadores hacia el futuro.

Sin embargo, también destacó que el sector se puede enfrentar a grandes retos, como es el alza de tasas.

¿Cómo funciona una Fibra?

La Fibra es un vehículo de inversión que busca captar recursos del público inversionista para comprar bienes raíces y derechos sobre rentas y a cambio, reparte el 95% de lo obtenido por el arrendamiento entre sus tenedores de certificados (algo así como las acciones), a través de los dividendos.

En México el instrumento está enfocado en los sectores industriales, comerciales de oficinas y hoteleros y  con Fibra E, la novedad es que se esté pensando en infraestructura y temas energéticos, lo que supone ya un reto pues no hay un antecedente de cómo podría funcionar el cuestión de los dividendos y cómo sería la repartición de beneficios entre los inversionistas.

Otro reto que advierten los especialistas es que este sector sigue reglas muy específicas y precisas y con ello es de los pocos sectores que gozan de un beneficio fiscal por parte de la Ley de ISR, y en esta línea, Alik García, de Intercam, consideró que al ser este un instrumento para infraestructura, podría requerir que se hagan modificaciones en dichas reglas.

Tanto para él, como para el especialista Marco Medina, analista de BX+, no cabe duda que este es una buena iniciativa del gobierno para incentivar la inversión en el país, punto en el que Medina agregó que lo que haría el gobierno es hacer uso de los activos que ya tienen algunas compañías como Pemex y a través de este instrumento se obtendría dinero para invertir en estas empresas.

“De esta manera se obtienen beneficios para el Estado y sus empresas y para los inversionistas”, consideró. En un contexto donde la petrolera mexicana se encuentra con serios problemas para financiar nuevos proyectos, como lo han señalado analistas de Moody’s.

Otra empresa que ya ve los beneficios de este instrumento es Comisión Federal de Electricidad (CFE), pues de acuerdo con el propio secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, con este instrumento la firma podrá expandir sus líneas de transmisión y distribución.

En el caso de Pemex, “permitirá que extienda sus actividades de exploración y extracción de hidrocarburos en la reconfiguración de sus refinerías, así como en otro tipo de inversiones productivas”, señaló.

Por otro lado, Solano advirtió que el tema de que Estados Unidos decida incrementar sus tasas de interés y por tanto México, será un punto que dificultará un tanto al sector de Fibras. “Las Fibras como tal están muy sujetas a diversos riesgos y contextos, pero tienden a ser muy sensibles a un escenario de volatilidad en tasas, entonces podría ser un reto para el gobierno pagar un dividendo al inversionista”

Y añadió, “estamos en una coyuntura –continuando con el tema de tasas de interés- que en general para las Fibras habrá que evaluar, por lo que me resulta limitado entender cómo va a salir este proyecto”.