Las calificaciones crediticias para las empresas mexicanas Pemex y CFE fueron revisadas a la baja ahora por Fitch pasando a BBB+ desde A-, en su escala internacional. En su reporte, la firma señaló que la decisión surge como consecuencia directa de la merma en la calificación internacional del peso mexicano. 

En esa línea, Fitch señaló que "la calidad crediticia de estas empresas estatales está ligada a la del riesgo soberano dada su importancia estratégica para el país". Además, apuntó que como parte de una revisión amplia, en México dejaron de estar presentes fundamentos sólidos de las finanzas públicas en relación a los elementos de las finanzas externas". 

No es la primera calificadora que llama la atención sobre estos puntos. Moody’s ya había bajado la nota de Pemex en octubre pasado y también había advertido que podría hacerlo de nuevo si la petrolera no lograba evadir sus riesgos.

“Dependerá que en los próximos trimestres haya evidencia de que se va aprovechar la reforma, de que puede hacer asociaciones, los farm-outs, que reubique su cartera de activos de modo que los haga más productivos y reduzca su deuda, si a estas alturas del próximo año no hay esas señales, podríamos bajar nuevamente la calificación ya a grado especulativo”, habían dicho desde Moody's.

El FMI también había expresado su preocupación: "Será importante proceder con la consolidación fiscal planificada y la reestructuración de Pemex para preservar la confianza del mercado".