El Congreso de Nuevo León rechazó 107 cuentas públicas, varias de las mismas pertenecientes a los sexenios de Natividad González Parás y Rodrigo Medina. La bancada del PRI no puso objeciones pero quedaron asuntos pendientes que se tratarán el miércoles como el caso de supuesto desfalco del ISSSTE León.
El organismo de pensiones de los empleados estatales fue escenario durante ambas administraciones de duras perdidas de fondos como consecuencia de negocios financieros que se realizaron para incrementar beneficios pero que tuvieron un resultado desastroso.
Esta tarde sesionará la Comisión Primera de Hacienda para rechazar las cuentas de 2013 y 2014 de las cuentas de la ex Alcaldesa de Monterrey Margarita Arellanes.
Desde la semana pasada Enrique Ochoa monitoreaba de cerca que el desarrollo del tratamiento de las cuentas fuera una señal de que el partido está comprometido con la transparencia y que no habrá beneficios para Medina.
Según expresan legisladores del PRI, el diputado Marco González, coordinador tricolor, busca capitalizar el tratamiento de las cuentas para su aspiración al Senado en 2018.
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