El contexto electoral rumbo a la presidencia se está adelantando como nunca, lo que está provocando jalones fuertes en los partidos. El PAN particularmente está viviendo una interna durísima y ya muy mediática, bastante inusual dentro de la historia del Blanquiazul.

Sin embargo, recientemente el ex líder de los panistas, Gustavo Madero, rompió esta tradición más “discreta” del partido al hacer público el incumplimiento de quien ahora tiene ese puesto, Ricardo Anaya, y no dejarle la mesa directiva en San Lázaro.

Los jaloneos en la bancada panista ya se venían calentando y ya desde los resultados positivos que tuvo durante las elecciones locales de junio, LPO venía advirtiendo el peligro que, asumiendo ese triunfo, las fracturas internas se harían presentes en una pugna de intereses entre personajes como Anaya, Margarita Zavala y Rafael Moreno Valle, los grandes interesados en ser los futuros competidores en 2018.

Efectivamente, coinciden politólogos en diálogo con La Política Online, lo que hay detrás de este conflicto mediático entre Anaya y Madero radica en este juego de poderes, “en un juego de ajedrez político”, en donde nadie se quiere quedar sin voz ni voto.

Así, cuando el actual presidente del PAN deja fuera a Madero, éste reacciona de manera inmediata a cuestionar los intereses de Anaya y le pide que se defina ya; lo que ha decir de los especialistas no se trata sino de, precisamente, esa pugna de poderes a su interior.

En el análisis de la politóloga Claudia Ramón, se trata de las posibilidades que está viendo el partido de llegar a Los Pinos en dos años: “Ahora las condiciones se están dando, con el debilitamiento del PRI y los resultados de las encuestas que posicionan fuerte al PAN, por lo que para los priístas ya no se trata sólo de vencer a López Obrador, sino que ya reconocen en el PAN un adversario difícil”.

Pero también se trata de que se pone en evidencia las contradicciones dentro del PAN, “Estamos frente a la exhibición de lo que ahora es el partido: una pugna de intereses por la estructura del partido”, señala por su parte el politólogo Jorge Márquez.

Y es que en este escenario de pugnas ya más mediatizadas, no sólo está el cruce entre Madero y Anaya, hay que recordar también la falta de claridad para poder elegir a la dirigencia en el Estado de México y los recientes audios filtrados en donde se pondría en evidencia la pugna interna desatada por la designación de la presidencia de la Mesa Directiva en la Cámara de Diputados.

En este escenario, luchar por quién se va a posicionar frente a 2018 y acaparar puestos estratégicos, está envolviendo en el escándalo a los blanquiazules; en donde figuran, por un lado, el frente margarita Zavala y el panismo ex presidencial de Felipe calderón y por otro lado la estructura del partido –en donde Anaya parece buscar cómo seguir creciendo- y otros que encabezan Moreno Valle o el mismo Madero “que estarán tensionando el proceso”, consideró el experto.

Aún faltan dos años pero lo que ocurra en estos momentos será fundamental: puede catapultar o enterrar a los personajes presidenciables. En las encuestas, dentro del PAN es la ex primera dama quien más mide, pero Anaya no deja de evaluarse con fuertes posibilidades por lo que juega ahora más que nunca sus cartas.