Años atrás en un reportaje con el New Yorker el penalista Ron Fischetti señaló que en los inicios de su carrera solía dedicar un momento todas las tardes para tomar café en el Waldorf Astoria como una estrategia para ver gente conocida y conocer potenciales clientes para su emergente firma. Tal vez por eso su oficina más nueva está a dos cuadras de ese hotel , en Midtown, lejos del aire distinguido del Upper East Side donde también supo tener un despacho.

Abogado de celebridades, reverenciado por Harvard Law Review, señalado por sus competidores como figura con nexos en el bajo mundo, Fischetti es desde esta semana el defensor de Carlos Djemal, el inversor mexicano detenido en Chicago por supuesto lavado de dinero y asociado a InvestaBank, entidad que apura los tiempos para absorber la cartera de clientes del Deutsche Bank en México. 

Fischetti enfrentará a otra figura celebre en el firmamento de Manhattan. El fiscal de delitos económicos Preet Bharara, que fue quien acusó a Djemal ante la corte del Distrito Sur de Manhattan, donde se han desmoronado algunas de las estrellas del mercado de capitales más poderoso del mundo. Cuando EU se desmoronaba por la crisis de las hipotecas subprime, Bharará brilló al llevar a la corte a ejecutivos de los principales bancos de inversión. Fue tan devastador el alcance de sus investigaciones que debió dejar de mostrarse en sociedad por un largo tiempo.

A Djemal el gobierno de Estados Unidos lo acusa de obtener al menos 400 millones de pesos en devoluciones de IVA durante unos seis años, por medio de un fraude con la exportación de teléfonos celulares inservibles. Ya se le negó la prisión domiciliaria.

La llegada de Fischetti al caso InvestaBank le aporta una nueva dosis de atención a un escándalo que en México se comenta por lo bajo y que no tiene correlato en los grandes medios. Obvio: la entidad se encamina a manejar los fondos de los millonarios que antes controlaba el Deutsche. Además de que Investa tiene vinculación con Manuel Arroyo, actual propietario del periódico El Financiero.

Ahora el Investa quiere que Djemal, que siempre fue inversor de bajo perfil, se libere cuanto antes de su participación en la entidad. Confían en que así sea ya que Djemal precisa liquidez para pagar a uno de los abogados más caros de Nueva York. 

Fischetti defendió al ex fiscal federal Dan Perlmutter por robo de dinero en la oficina del Fiscal General en Nueva York, a la cantante Courtney Love en su disputa legal tras ser condenada por tenencia de drogas e incluso Elaine Kaufman, dueña del histórico restaurante Elaine s donde solía concurrir la alta sociedad de Manhattan.