Todo parece indicar que los legisladores avanzan contrarreloj y buscan la forma de sacar la ley de Seguridad Interna lo antes posible, lo que no sólo está derivando en fuertes jaloneos entre senadores y diputados, sino las fuertes críticas y sospechas de que el tema se resolverá en "un albazo", sin tener el análisis preciso que el tema requiere. 

En el PRI y el PAN la respuesta fue casi desesperada. Claro, ambas bancadas se disputan el proyecto que será analizado. Desde el Senado, el panista Roberto Gi Zuarth defiende su propuesta, mientras que desde Diputados están los priístas con la propuesta de César Camacho.

Por lo pronto, la ruta ya comienza a definirse: ambas Cámaras decidieron trabajar de forma conjunta, lo cual es celebrado desde ambos lados. "Trabajaremos en conferencia", dicen al explicar que se conformará una suerte de bicameral. De todos modos, ahora la discusión abierta es cuál será la cámara de origen y si habrán de irse a algún periodo extraordinario.

Todos están de acuerdo en la necesidad de sacar la ley. Ya hay consenso para que las dos cámaras trabajen 'en conferencia', pero todavía se discute cuál será la cámara de origen.

El primero en pronunciarse a favor de ello fue el senador Emilio Gamboa, con un eco más mesurado por parte de los panistas. Hoy el mismo Marko Cortés, coordinador de los diputados panistas consideró que estaban preparados para que eso ocurriera. 

Cortés pidió que sea San Lázaro la cámara de origen, y aprovechó además para ponerse en línea con académicos y organizaciones civiles que exigieron que esta iniciativa vaya acompañada por un profundo debate en torno a las policías. 

En ese sentido, recordó que en el Senado está esperando dictamen el Mando Mixto -la contra propuesta panista a la de Mando Único de Peña Nieto-, en donde se puede profecionalizar y fortalecer el papel de la Policía, uno de los principales puntos por los cuales se ha permitido la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles. 

Preocupa un albazo 

Nadie contradice la necesidad de desahogar esta ley, todos concuerdan con que es legítimo el llamado de Cienfuegos, pero  la oposición alerta ante la rapidez con que están tratando el tema desde el PAN y el PRD. "Tardaron una década y quieren sacarla en diez días", criticó el senador perredista Luis Humberto Fernández.

Coincidiendo con el plazo que dio el priista, desde el Senado, Pablo Escudero ya dijo que se destinará una semana de foros con las organizaciones sociales. Pero para Moreno y el PRD no es suficiente. 

Cuartoscuro

"Parece que lo quieren aprobar en un albazo y eso sería terrible, pues falta claridad en las propuestas y un periodo extraordinario es insuficiente, pero parece que los legisladores están aprovechando estas fechas en que la población está distraída para para que nazca con falta de legitimidad", criticó.

Desde San Lázaro, el diputado de Morena, Vidal Llerenas señaló con dureza también: "lo que quieren es aprobarla pero sin dictámenes, se quieren ir a un periodo extraordinario y con ello no habrá tiempo de dictaminar", señaló

Y en el mismo tenor, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Fernando Herrera, advirtió que sólo de haber dictamen se irán a periodo extra, de lo contrario, la ley se discutirá hasta febrero.

El acuerdo se antoja difícil. La presión del PRI por irse a periodo extraordinario es latente, al igual que la del PAN por discutir al mismo tiempo esta ley como la de Mando Mixto e imponerse en diputados la Cámara de origen y el tiempo, efectivamente apremia.