Como queriendo dejar atrás ese personaje confrontativo, enfrentado con los grandes medios de comunicación a los que ha acusado de desatar una guerra en su contra, ahora Andrés Manuel López Obrador da un revés y vuelve a aparecer en Televisa y los grupos más importantes del país dando un giro interesante a su estrategia.

En el 2008 López Obrador parecía romper de manera definitiva con los medios con una protesta a las afueras de Televisa donde con dureza aseveró que esta empresa era “la fábrica más grande de mentiras”. Acusó a los medios de ser parte de la mafia del poder y avaluar el fraude electoral que él siempre ha acusado ocurrió en 2006 cuando asumió la presidencia Felipe Calderón.

A ocho años de ese episodio, el líder de Morena volvió a aparecer en uno de los medios más importantes del país. Fue en septiembre cuando concedió una entrevista con Ciro Gómez Leyva para Grupo Fórmula.

La siguiente fue precisamente con Televisa, una entrevista televisiva encabezada por Carlos Moret de Mola, posteriormente en el radio con Joaquín López Dóriga y finalizó la semana con una entrevista para la plataforma Nación 321, del Financiero.

Además de reaparecer en estos medios a los que el tabasqueño se había confrontado contundentemente, sorprendió por un discurso mucho más moderado y conciliador. El ejemplo más claro de ello fue cuando aceptó en la entrevista con Loret de Mola que estaría dispuesto a trabajar a lado de Enrique Peña Nieto de requerirse un frente por los efectos negativos del gobierno de Donald Trump.

“Está tratando de parecer un hombre de Estado, dirigiéndose a una audiencia que quiere escuchar cómo salir del escenario tan sombrío que se prevé”, opinó consultado por La Política Online, el analista político Peter Gwilliam.

Cuartoscuro

Es decir, estas apariciones marcan un giro en la estrategia de López Obrador. “Él y su equipo son conscientes que la gente muestran un hartazgo hacia la politiquería y ahora se le ve adueñándose de líneas discursivas que el electorado pide: un cambio radical, pero no violento.

En su análisis de estas apariciones el experto señala que es un mensaje ya no sólo a la ciudadanía, sino a las estructuras de poder, mucho más global y comprensivo, con un papel conciliador que ya no le habla sólo a sus seguidores, sino que busca a acercar a aquellos que se ubican más al centro, incluso a la derecha.

El analista consideró que de seguir en este posicionamiento logrará crecer en las preferencias, pero ¿logrará mantener este posicionamiento? El especialista reflexionó que ya anteriormente el controversial político había manejado una compaña por la “república amorosa”, que se fue apagando “para regresar a ser de nuevo él, ese personaje rejego y combativo que hace dudar a los del centro”.

¿Por qué la apertura de los medios?

En este relanzamiento del discurso de López Obrador el papel de los medios de comunicación también llama la atención. ¿Por qué de pronto esta apertura a un personaje al que más de una vez nombraron como “un peligro para México”? En un regreso donde el discurso moderado también se vio por parte de ellos.

Será acaso que esta vez, en el tercer intento del ex jefe de gobierno de la Ciudad de México por llegar a Los Pinos, los medios están observando posibilidades más reales en medio de la crisis que presenta el PRI y los jaloneos en el PAN y el posicionamiento que está teniendo Morena.

Pero aunado a esto, el especialista también ve como favorable el entorno internacional. “Esto es parte de los coletazos de Donald Trump, que replantea un posible triunfo para Obrador”. Y agrega los movimientos a nivel mundial donde se han impuesto figuras “anti sistema”.

Sin duda, los medios no querrían tener una relación rasposa con un muy fuerte contrincante que además, se renueva en discurso, explora nuevos caminos, da revés a su postura para apostarle al diálogo y a la conciliación. ¿Crecerá esta buena relación o alguno de los dos dará marcha atrás? 2017 sin duda dará de qué hablar también electoralmente hablando.