La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) publicó una recomendación para el secretario de la Marina, Vidal Francisco Soberón, por el caso de Claudia Medina Tamariz, veracruzana que sufrió una detención arbitraria en instalaciones militares, de falsos cargos y de tortura sexual por elementos de la secretaría de Marina Armada de México en Veracruz el 7 de agosto de 2012.

Pese a que la secretaría a cargo de Vidal Soberón siempre defendió la presunción de inocencia de los elementos de su dependencia, la víctima fue revindicada por la CNDH, luego de que denunciara públicamente cateo ilegal y “violación a la integridad personal” en varios medios de comunicación y mantuviera una lucha de poco más de cuatro años donde no sólo hizo público su caso sino que promueve la denuncia de otros y el castigo a los responsables.

La Comisión solicitó que la Semar acompañe y colabore en la investigación y en la denuncia que el ombudsman hará ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra seis agentes navales, además de solicitar que la víctima sea inscrita en el Registro Nacional de Víctimas.

Bajo el número 62/2016, la recomendación resaltó que de acuerdo con la investigación de la CNDH, elementos de la Semar ingresaron al hogar de la víctima cuando dormía con su esposo y, a golpes, adatada de manos y vendada de los ojos, la llevaron a una base naval donde estuvo ilegalmente retenida por 39 horas, no sin antes catear su domicilio sin una orden judicial.

“Nos subieron a una camioneta y nos trasladaron a las instalaciones de la base naval ubicada en el kilómetro 13.5 de la carretera Xalapa-Veracruz, junto al aeropuerto internacional”, narró Claudia Medina.

La Marina, respetuosa de las autoridades, señala que en ningún caso se ha realizado encubrimiento alguno de hechos o de personal involucrado en este caso o algún otro.

Tras las casi 40 horas que fue retenida, donde sufrió tortura física, sexual y psicológica (incluidas vejaciones sexuales, amenazas a su familia, asfixia o descargas eléctricas), el 8 de agosto de 2012 Medina fue obligada a firmar una declaración que los elementos de la Semar redactaron, en las instalaciones de un Ministerio Público Federal.

A continuación, como en la fábula de Gerardo Naranjo (Miss Bala), fue presentada ante las cámaras y micrófonos de los medios de comunicación como integrante del Cártel de Jalisco Nueva Generación. En ese momento, se relató una historia totalmente distinta a los hechos de su detención y fue vinculada a proceso por delincuencia organizada, portación de arma de fuego de uso exclusivo del ejército.

La CNDH informó que Medina denunció ante la dependencia el 17 de octubre de mismo año, ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Veracruz, aunque seis días más tarde el organismo nacional tomó la competencia del caso.

De acuerdo con la Semar, la actuación de los seis agentes navales sucedió en el “marco de las acciones en apoyo a la Seguridad Pública del Estado”, durante la estrategia de la guerra contra el narcotráfico decretada por el panista Felipe Calderón.

“Esta Institución, respetuosa de las autoridades, así como de sus competencias y resoluciones, señala que en ningún caso se ha realizado encubrimiento alguno de hechos o de personal involucrado en este caso o algún otro”, se lee en el comunicado emitido por la dependencia federal.