Fallas técnicas complican el cierre de año de Interjet y Magnicharters, que ven su rentabilidad afectada por deficiencias en ambos servicios.

 Las finanzas y participación de mercado en México de Interjet serían afectadas por la suspensión de operaciones de 22 de sus aviones Superjet 100.  La aerolínea informó que reembolsará el dinero de los pasajeros que no logre transportar o pagará sus boletos en otras líneas aéreas.

De acuerdo con fuentes consultadas, la aerolínea afectada suele pagar a precio completo los boletos que sus pasajeros utilicen en los aviones de otras compañías.  También se podría ver afectada su participación de mercado, que viene bajando desde el año pasado.

Entre enero y noviembre de este año, Interjet transportó al 21.6 por ciento de los viajeros domésticos, menor al 24.7 por ciento registrado en el mismo lapso del 2015, de acuerdo con datos de la Dirección General de Aeronáutica Civil.

Sin embargo, debido a que algunos de los vuelos afectados son al extranjero, también podría haber un impacto sobre su participación en el mercado internacional, en la que subió de 13.55 a 17.49 por ciento entre el 2015 y el 2016.

La aerolínea decidió suspender la venta de boletos en algunas rutas internacionales afectadas donde opera con el Superjet 100, pero también prepara modificaciones a sus itinerarios para atender a los pasajeros potencialmente dañados.

En paralelo, Magnicharters, la única que opera de manera casi exclusiva sobre el modelo de venta de paquetes vacacionales, ha perdido 13.8 por ciento de sus pasajeros, pues entre enero y noviembre atendió a 823 mil 940 personas, mientras que en el mismo lapso del año anterior sumaron 955 mil 841 usuarios.

En los primeros 11 meses de 2016, todas las aerolíneas en conjunto transportaron a 48 millones 182 mil usuarios, contra 42 millones 604 mil del mismo periodo correspondiente al año anterior. Además de esto, durante los últimos meses la chartera sufrió por lo menos dos incidentes.

El más reciente fue la ponchadura de una llanta de un avión modelo Boeing 737 en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) el pasado 9 de noviembre, lo cual provocó el cierre temporal de la pista 5R/23L.

Otro similar ocurrió el 26 de noviembre del 2015, cuando una aeronave del mismo modelo sufrió el colapso de uno de sus trenes de aterrizaje al arribar a la Capital del País, procedente de Cancún.