La liturgia comunicacional del PRI está intacta. El regreso de Luis Videgaray comenzó hace varias semanas, cuando las principales plumas de los diarios empezaron a filtrar el movimiento que ya estaba planeando Enrique Peña Nieto en su Gabinete.
Desde las columnas más amistosas se informó que Videgaray estaba listo para tomar el control de la Cancillería, bajo la lectura de que la victoria de Donald Trump había sido un espaldarazo tardío hacia su jugada de reunir a Trump con EPN en plena campaña.
La información era tan milimétrica que incluso se pronosticaba que el anuncio se daría en los primeros días de enero, al regreso de las vacaciones del Presidente. Así sucedió. Sólo un dato no se pudo confirmar y acaso esconda un problema de fondo para el equipo más cercano de Peña Nieto: Claudia Ruiz Massieu no habría aceptado la Secretaría de Cultura.
Peña Nieto dijo hoy que recibió -y aceptó- la renuncia de Ruiz Massieu. Y como sucesora del fallecido Rafael Tovar y de Teresa, nombró a María Cristina García Cepeda. Así, la sobrina de Carlos Salinas de Gortari quedará afuera del Gabinete.
La Política Online explicó semanas atrás que la visita de Donald Trump detonó un conflicto subterráneo entre el entorno más cercano de Peña Nieto -encabezado por el propio Videgaray- y Salinas.
El ex presidente se sintió ofendido por el desaire a Ruiz Massieu, que como Canciller ni se enteró de las gestiones para traer al todavía candidato republicano. En pocas horas, todos los medios de prensa supieron que el gestor había sido Videgaray, en contra de la opinión de muchos secretarios.
Se supo también que la titular de Relaciones Exteriores había presentado su renuncia. Misma actitud habría tomado Miguel Ángel Osorio Chong, el otro aspirante fuerte a la sucesión. El impacto fue enorme.
Ahora el hombre fuerte de Peña Nieto regresa. "Será prioritario continuar el acercamiento estratégico con las economías más poderosas, especialmente del Grupo de los 20. También acelerar el diálogo y los contactos con el nuevo gobierno de los Estados Unidos", dijo el mandatario.
"Para que desde el primer día se puedan establecer las bases de una relación de trabajo constructiva. Todos estos objetivos deberán alcanzarse, sin menoscabo de la dignidad de los mexicanos. También deberá asegurar la protección a los mexicanos que residen en el exterior", concluyó Peña Nieto.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.