Los dos gobernadores fronterizos con EU que tiene el PRI brillaron por su ausencia ayer en la reunión de la Conago en Nuevo Laredo.  Claudia Pavlovich de Sonora y Ricardo Moreira de Coahuila no asistieron al encuentro donde el tema central fue las deportaciones que podrían tener lugar en la administración de Donald Trump.

Estuvieron Jaime Rodríguez (Nuevo León), Graco Ramirez (Morelos), Javier Corral (Chihuahua), Francisco Vega (Baja California) y el anfitrión Francisco Cabeza de Vaca (Tamaulipas).

El Gobierno tenía la inquietud de que de esa reunión surgiera algún tipo de pronunciamiento que pudiera alterar la relación con Estados Unidos en un tema tan crucial como es la Seguridad. Luis Videgaray lo viene explicando a su nuevo equipo de la Cancillería: "Las deportaciones para México son una cuestión eminentemente humanitaria pero para EU es un tema de seguridad". Una idea que cobra fuerza ahora que ya es casi un hecho que el Senado le dará el aval a Jeff Sessions para que sea el fiscal general de Trump.

No solo es una cuestión de diplomacia. En Gobernación (Miguel Ángel Osorio Chong) habría algunos reportes complejos sobre la inseguridad en Tamaulipas y lo que el panista Cabeza de Vaca está haciendo al respecto. Es de por si notable que el ex senador hizo campaña con el argumento de su relación con EU como clave para ir combatir la inseguridad. Nada ha cambiado en sus primeros meses.

Estos factores confluyeron para el requerimiento a Pavlovich y Moreira de no aparecer por Nuevo Laredo. Son dos gobernadores en un momento especial. Pavlovich es vista por el entorno presidencia como un alfil de Manlio Fabio Beltrones mientras que Moreira está cercado por un expediente que se está trabajando en la justicia de Texas a partir de las declaraciones de Luis Cervantes, empresario acusado de lavado de activos.

El Gobierno o quería a los dos gobernadores fronterizos que le quedan involucrados en cualquier tipo de consigna que finalmente nunca llegó. La reunión fue más operativa que política y se habló de organizar un fondo para ayudar a los deportados. Videgaray ya entiende que no habrá demasiado margen de error.