Desde el PRI continúa el llamado a boicot contra la firma estadounidense Ford. Esta vez provino desde el gobierno de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, quien dijo que su administración no adquirirá vehículos de esta marca.

Ello como una respuesta a la decisión de la automotriz de cancelar inversiones ya comprometidas para San Luis Potosí, cediendo así a las amenazas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.

En el marco de su Plan de Acción para Ajustar el Gasto Público y Apoyar la economía, el mandatario estatal convocó a que estas acciones se multipliquen en todo el país y adelantó que entregará patrullas previamente adquiridas para la seguridad de esta marca.

“Yo convoco que acciones como ésta, que fortalecen nuestra unidad como mexicanos, se multipliquen en todo nuestro país. Llegó la hora de demostrar de qué estamos hechos los mexicanos”, externó.

Antes, las empresas Coconal y Xcaret también anunciaron que dejarían de comprar productos de Ford. Ambas empresas con fuertes vínculos con el PRI, por lo que con suspicacia, entre los politólogos se señaló que podría estar el gobierno detrás de ello, en una especie de respuesta política a las amenazas de Trump, pero fuera del discurso oficial.

Precisamente, Moreno Cárdenas es un personaje con fuertes vínculos con los pinos, desde su estrecha relación con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, con quien el campechano en más de una ocasión ha buscado evidenciar   su gran “amistad y hermandad”.

Cárdenas también estuvo señalado por tener nexos con el controversial caso de Oceanografía y fue ampliamente señalado  de aprovechar sus contactos para personalmente cabildear a favor de Mario Ávila, ex subdirector en Pemex, perseguido por el fraude.