Mauricio Macri invitó este lunes a Evo Morales a ver el superclásico de Boca y River para bajar la tensión que se desató con Bolivia por las nuevas medidas migratorias que quiere implementar su administración en la frontera norte con el país vecino.

El presidente argentino firmó un decreto para reforzar los controles fronterizos y deportar de inmediato a cualquier extranjero que delinca. Pero el foco está puesto en Bolivia, Paraguay y Peru, según dijo la propia ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien afirmó que "peruanos y paraguayos vienen a matarse (a la Argentina) por el control de la droga".

La polémica fue escalando y el presidente del Senado de Bolivia, José Alberto Gonzáles, acusó a la primera dama de Argentina, Juliana Awada, de tener bolivianos como "trabajadores esclavos" en sus talleres textiles. La joven esposa de Macri es dueña de una importante marca de ropa que lleva su apellido y no es la primera vez que al igual que muchos de sus pares, se ve envuelta en acusaciones de tener inmigrantes como trabajadores esclavos.

Luego de esa bomba, el propio Evo Morales envió este lunes una misión oficial, encabezada por el canciller de ese país, Fernando Huanacuni, para verificar la situación de los residentes bolivianos, por el endurecimiento en las políticas migratorias y la idea de construir un muro fronterizo que lanzó el diputado jujeño Alfredo Olmedo.

Como respuesta a las medidas de Macri, el presidente del Senado de Bolivia acuso a su mujer, la primera dama y empresaria textial, Juliana Awada, de tener bolivianos como trabajadores esclavos en sus talleres.

En ese marco, el embajador argentino en Bolivia, Normando Álvarez, se reunió este lunes con Huanacuni y anunció que Macri se reunirá antes de junio con Evo.

"Hay que calmar las aguas", señaló Álvarez y reveló que Macri invitó a Evo, fanático del fútbol, a presenciar el clásico de Boca-River que está programado para el 16 de abril en Buenos Aires.

"Hubo errores en cuanto a la manera que se lanzaron los decretos, las modificaciones a la ley, creo que Argentina y Bolivia deben pelear para que no exista ningún muro ni físico ni ideológico porque tenemos que respetar nuestra historia en común", aseguró el embajador argentino.

Michelle Obama junto a Juliana Awada, la primera dama de Argentina.

Presidencia Argentina

La ministra Bullrich, que recibió este lunes a la comitiva boliviana, había calentado la previa del encuentro con un cruce directo a Evo: "La ley migratoria es la misma que tiene Bolivia", afirmó la encargada de la Seguridad argentina.

"Hay un ruido por parte de Bolivia que me parece que no es consistente ni con sus decisiones políticas y sus leyes", enfatizó Bullrich y dijo que "la ley boliviana es similar (a la argentina) pero tiene características menos positivas que las que tiene la Argentina".

Mientras que el vicecanciller argentino, Pedro Villagra Delgado, recibió en el Palacio San Martín a la delegación gubernamental de Bolivia y les explicó que las nuevas medidas "no son una política antiinmigración sino que es un tema que incluye solamente a los extranjeros que delinquen".

No es la visión que comparte el premio Nobel de la Paz argentino, Adolfo Pérez Esquivel, quien dijo que Macri "esta copiando la política de Trump: cerrar las puertas a los inmigrantes por miedo". Misma lectura que hicieron el New York Times como The Guardian, sostuvieron que Macri está copiando las políticas migratorias de Trump.